Capítulo 27 – Celos
BPOV
Camine por el pasillo, aun confundida por lo
que me dijo Edward y las risas de Jasper sobre el ataque de celos de Benjamín, ¿sería
por lo del pasillo? ¿Edward le habrá dicho algo? No lo creo… ¿Qué le sucederá a
Edward? su rostro denotaba dolor incluso vulnerabilidad muy extraña en él, creo
que la única vez que lo he visto así fue cuando estábamos en la cafetería unos
meses atrás, cuando supuestamente las cosas iban a cambiar.
-¡Bella te estoy hablando! – Benjamín me
sacudió por lo cual pestañee volviendo a la realidad - ¿Por qué demoraste tanto?
– estaba molesto, lo note en la inflexión de su voz.
-Me estaba despidiendo de los chicos… - fruncí
el ceño al mirarlo bufar molesto cuando arranco el auto -¿Qué te pasa? – le
pregunte
-Nada Bella, ponte el cinturón de seguridad –
al hacer el click con el cinturón, encendió el auto y partimos rumbo a su
departamento, este fin de semana disfrutaríamos juntos en las montañas del
Parque Nacional donde Benjamín rento una cabaña.
El siguió en silencio, y yo cada vez me sentía
más incómoda con la situación, ya cuando entramos al estacionamiento era
insostenible, por lo que me moleste realmente yo no había hecho nada para que
él se comporte de esa manera.
-¿Me vas a decir de una vez que es lo que pasa
o mejor me voy a mi casa? – él no me miro hasta que saco la llave del contacto.
-¿Qué hacías con Edward en el pasillo? – Era
verdad todo esto eran celos ridículos.
-Sólo le preguntaba cómo estaba se veía
realmente mal cuando llego… - él se rió fuerte y eso me molesto más aún.
-Bella… llevas meses sin hablarle ¿ahora te preocupa como esta?
-No sé qué es lo que piensas Benjamín, pero
esa es la verdad – me cruce de brazos enfrentándolo con la mirada – además ¿me
puedes explicar que es eso del ataque de celos? – alce una ceja esperando su
respuesta.
-No es un ataque de celos, sólo le deje claro
a Edward Cullen, que tú eres mi novia. – bufé por el tono posesivo de Benjamín.
-Creo que él lo sabe… - Benjamín abrió la
puerta del auto para salir pero antes de
hacerlo se volvió.
-Nunca está de más recordárselo – Abrí la
puerta enojada caminando en dirección al
ascensor verdaderamente molesta, dejando a Benjamín atrás.
-¡Bella! – gritó cuando las puertas del
ascensor se cerraron porque accione su piso ¿Qué se creía? ¿Acaso no me conoce?
¿Por qué se comporta así si con otros hombres no lo hace? ¿Es por Edward? las
puertas se abrieron por lo que salí al pasillo paseándome frustrada por
comenzar mal este fin de semana. Al Final me senté al costado de la puerta
justo cuando Benjamín salía del elevador, con cara de enfado.
-¿Por qué nunca traes tu llave? – me dijo
mientras abría la puerta.
-Porque es tu casa no la mía – me puse de pie
sin siquiera arrepentirme de esas palabras que sabía le molestaban en demasía.
Era muy cuidadosa de no darle falsas esperanzas de que me vendría a vivir con
él, jamás deje nada mío acá, e incluso el cepillo de dientes que él compro y
coloco en el vaso del baño, jamás lo he usado.
-Bella… podemos dejar de discutir por
estupideces, mañana nos iremos a las montañas y disfrutaremos este tiempo
juntos, no lo arruinemos por favor – se acercó rodeándome la cintura con sus
torneados brazos
-¿Dejaras esos celos idiotas? – le pregunte
pasando mi dedo índice por sus labios. Él tenía razón no deberíamos discutir
por tonteras
-Bella, no puedo evitarlo… - sonreí por la
expresión de sus ojos ambarinos que me miraban divertidos, hizo un lento
movimiento acercándose a mi boca – eres irresistible y sé que provocas sin
saberlo – beso suavemente mis labios – además eres mía- ahora su beso fue
feroz, acentuado con el agarre de mi cintura, como si quisiera fundirse en mí –
te quiero… pero tengo hambre ¿vamos a calentar la comida? – le sonreí
soltándome de él.
Calentamos la comida y nos fuimos al living
para mirar la televisión mientras comíamos.
-¿Ben? – me moví en el sillón dejando mi plato
en la mesa lateral
-mmm… - me respondió sin dejar de ver la
televisión por lo que me reí
-¿Por qué te pones celoso de Edward? – Capte
su atención completamente, me acerque y acaricie su pecho - Cuándo salimos con tus amigos, nunca te
molesta que me acerque a ellos o incluso cuando Félix me coquetea descaradamente…
-Es porque siempre le interesaste a Edward –
me incorpore para mirarlo – Cuando te conocí, pensé que estaban juntos por la
forma posesiva que él te trataba. - Me quede pensando en eso de verdad Edward
siempre fue así.
-Edward siempre fue así conmigo – en mi estómago
revolotearon las mariposas como lo hacían cada vez que pensaba en él – hasta
que nos distanciamos – subí los hombres indiferente.
-¡Por Dios Bella! – Dijo frustrado mirándome
intensamente - ¿Acaso no lo ves? –Negué con la cabeza esperando a que
continuara- ¡Le gustas! ¿Cómo no te das cuenta si es tan evidente? Siempre le
gustaste y por una extraña razón tiene una especie de fijación por ti, lo era antes
que se casara y lo es ahora que está casado de igual manera.
-Edward es extraño no lo niego pero él está
enfocado en otras cosas - mire la televisión tratando de buscar una salida y
Benjamín se diera cuenta que a mí también me provocaba cosas Edward.
-¿Sabes porque Rose no tolera a Edward?
-No, nunca se los he preguntado a ninguno de
los dos…
-Dudo que Rose lo cuente en realidad y menos
Edward – con eso pincho mi curiosidad así que me acomode a su costado esperando
que comenzara, pero al pasar los minutos no me dijo nada y se quedó mirando la
televisión.
-Ben, ¿me va a decir lo que sabes? – me miro
divertido con una inmensa sonrisa clavada en la cara
-No… - me tomo de la cintura y me puso a
horcajadas sobre sus piernas- si quieres saberlo pregúntale a Rose, en verdad
ella podrá contarte todo, yo solo sé una parte
-Eres malo – hice un puchero y Benjamín se
aferró a mi espalda para que no escapara y así tomar mi labio en su boca – ¡No!
– grite riéndome – no me dices entonces no te dejo besarme – sus manos se
posaron en mis costillas.
-No te vas a escapar preciosa… - comenzó a
hacerme cosquillas y yo me revolqué cayendo al sillón soltando lágrimas, risas
y gritos de histeria, hasta que finalmente me rendí, dejando que me besara. Nos
quedamos así varios minutos dándonos pequeños besos – vamos a dormir preciosa,
mañana saldremos temprano al parque y debemos descansar.
-Está bien – déjame llevar los platos a la cocina
y dejar limpio antes de acostarnos.
¿Qué será lo que paso Rose con Edward? Coloque
los platos en el lavavajillas. ¿Tendrá que ver en su forma de ser? Limpie los utensilios de la cocina, repase
los mesones hundida en mis pensamientos. Di un salto cuando vi a Benjamín
mirarme fijamente desde la puerta.
-Bella… - se acercó a grandes zancadas – te ves
tan hermosa, cómoda y feliz acá, conmigo – lo abrace dejando un beso en su
pecho y descansando mi cabeza ahí.
-Me siento cómoda –susurre apenas termine las
palabras sentí el cambio en el ritmo de su corazón, levante la cabeza para
mirarlo y me asusto le brillo de sus ojos, ¡Oh no!
-Ven a vivir conmigo Bella, sé que no te lo he
pedido formalmente hasta ahora, pero sueño con tenerte a mi lado todos los
días, con despertar cada mañana y poder besarte – me arrepentí inmediatamente
de mis palabras ¿ahora como salgo de esto sin ofenderlo, sin discutir? -
¿Quieres vivir conmigo?
-Ben… - di unos pasos hacia atrás hasta tocar
la encimera – no apresuremos las cosas, aun no es tiempo… - Vi su semblante decaer pero no podía hacerlo,
no podía dar ese paso.
-Bella, eres la mujer de mi vida… - se acercó
a mí nuevamente tomando mi cara entre sus manos – te amo – abrí los ojos por la
sorpresa de sus palabras, me asusté mucho más, yo lo quiero… he aprendido a
quererlo – No te asustes, pero prométeme que vas a pensarlo – me abrazo
fuertemente - ¿Me lo prometes? – me tome todos los minutos del mundo para
reaccionar, yo no podía hacer esto, hacerle esto a él.
-No puedo prometerte nada Ben… - lo mire
directo a los ojos para que entendiera mi verdad – no estoy preparada – el me
soltó bruscamente, sonriendo irónicamente.
-No sé cómo, pero tengo la certeza que nunca
lo estarás – salió de la cocina dejándome ahí.
Pase largos minutos mirando la nada, pensando
en que él tenía razón quizás nunca estaría preparada para dar el paso, o para
amarlo… simplemente porque en el fondo sentía que no era lo correcto, que no
era a él a quien tenía que amar, porque mi corazón no saltaba al estar con
Benjamín, mi corazón palpitaba desaforado por otro hombre, que por más que
tratara de apartar volvía a mí una y otra vez.
Entre en el dormitorio para buscar mi bolso,
no tenía sentido quedarme para disfrutar un fin de semana solos si estaríamos
discutiendo todo el tiempo, cuando salía del dormitorio Benjamín salió del
baño.
-¿Dónde vas? – cruce el bolso tomando mi
chaqueta
-Me voy a casa, creo que no estamos en
condiciones de salir de paseo solos – se apresuró en llegar a mi lado – Ben…
-No te vayas – me interrumpió – lo siento
Bella, sé que no debo presionarte, pero puedes entender que quiero tenerte conmigo…
-Ben… discúlpame a mí – toque su mejilla
suavemente – por ser tan indecisa, por aun no saber qué es lo que realmente
quiero – ahí estaba lo confesé – no quiero dañarte Benjamín, no quiero destruir
eso con una mala decisión.
-¿Es sólo eso? – su mirada me traspasó - ¿o
existe alguien más? ¿Quieres a alguien más? – baje la vista mirando su pecho
desnudo, reparando en que solo lo envolvía una toalla en la cintura.
-Sólo indecisión – me mordí el labio rogando
porque en realidad sólo sea eso.
Abrí la puerta
guiada por la suave música no sabía porque estaba tan nerviosa, me arregle el
cabello mientras caminaba en dirección al gran ventanal, donde las cortinas se
ondulaban por el viento cálido, me apresure a la terraza el sol me cegó por
unos minutos hasta que lo vi, su cabello estaba revuelto… sonreí al ver su ropa
se notaba tan cómodo mirando el paisaje. Apoye mi mano en su espalda sintiendo
la textura de liviana de su camisa, él se giró tomándome en sus brazos, besando
mis labios.
-Por fin mi vida
podemos estar juntos… - me apoye en su pecho completamente feliz.
-Te amo Bella…
-Te amo Edward…
De un momento a
otro estaba besando el pecho desnudo de Edward, sus manos tomaron mi cintura
poniéndome sobre él… un escalofrío subió por mi columna al sentir sus manos en
mis pechos desnudos...
-Edward, eso me
encanta – mordí mi labio rogando que no se detenga
-Eres exquisita
Bella… me encanta amarte, hacerte mía.
-Soy tuya Edward…
hazme tuya – sus manos acariciaban mi espalda y su lengua mojaba mi pezón, yo
quería sentirlo dentro de mí, era una necesidad, quería que me hiciera el amor…
-¡Bella! – Las
manos dejaron de acariciarme para sacudirme por los hombros - ¡Bella!
-Edward no te
detengas… te deseo… - abrí los ojos pero ya no lo veía mi corazón golpeteo en
mis costillas.
-¡Bella
despierta!
Abrí los ojos sobresaltada, Benjamín me
sostenía por los hombros y en su mirada había rabia y dolor, al darse cuenta
que estaba despierta él me soltó, me incorpore en la cama prendiendo la luz de
la lámpara.
-¿Qué sucede? – Benjamín estaba de pie
mirándome, me puse nerviosa sin entender que le pasaba.
-¿Qué estabas soñando? – Se acercó rápidamente
a la cama poniéndose a la altura de mis ojos – Dime Bella que estabas soñando.
-Yo… - cerré los ojos recordando que soñaba
con Edward, trague saliva ¿Estaría hablando en sueños? – yo… no lo sé.
-Eres pésima mentirosa ¿lo sabias? Lo tolere
hace unas horas cuando me decías que no querías a nadie, pero ahora no
Isabella… - se puso nuevamente de pie paseándose por el dormitorio - ¿quieres que
te recuerde con quien soñabas?
-Benjamín, es un sueño… - me puse de pie para
acercarme a él, pero se alejó, deje caer mis brazos a los costados de mi
cuerpo.
-Dime una cosa Bella ¿Me amas? – Cerré los
ojos pero fue peor - ¿me quieres? Quizás eso sea más fácil – su voz era tan
fría y dolida.
-Benjamín por favor…
-¡Nada Bella!... durmiendo dijiste que amas a
Edward – negó con la cabeza y yo cruce mis brazos sobre mi pecho reteniendo las
ganas de llorar y la vergüenza - ¿Me amas?
-Ben… - ¿Qué debía decirle? ¿Cómo me disculpo
por lo que grita mi subconsciente?
-Déjalo Bella – abrió la puerta del closet
sacando una chaqueta.
-¿Qué haces? – le pregunte aún sin acercarme
-¡Necesito pensar! – cuando paso a mi lado
para salir le tome el brazo para que no se fuera.
-Yo me voy Benjamín, no puedo justificarme
-Duermes conmigo pero sueñas con otro y ahora
no me impidas hacer lo que
quiero… Te cuesta un mundo decirme que me quieres,
pero a él lo amas…. – lo mire ya sin
contener las lágrimas, solté su brazo con eso él salió.
Llore llena de vergüenza y culpabilidad, yo no
puedo hacerle esto a Benjamín, él siempre ha sido sincero y yo nunca he podido
ser así con él… sus expectativas han sido inmensas en esta relación y yo ni
siquiera quiero arriesgarme ¿Por qué? Simplemente porque existe un fantasma en
mi vida, porque Edward se enraízo en mi corazón y aunque lo negara él estaba
ahí cubriendo todo… ahora Benjamín el hombre que era correcto amar y entregarme
para ser feliz, no lograba entrar porque ya estaba todo ocupado en mi corazón.
Seque mis lágrimas y comencé a vestirme mire
la hora eran las cinco de la mañana aún era temprano, pero no había
alternativa, yo sabía que no podía justificarme con Benjamín.
Llame un taxi para que me llevara de vuelta a
casa, cuando baje el conserje del edificio me indico que ya me esperaban. Por
la ventana del auto se filtraba el amanecer, me sentía triste por la forma que
pasaron las cosas, pero de alguna otra manera también me sentía aliviada, como
si la presión constante que la relación con Benjamín me suponía de repente
desapareciera.
-¿Esta es la dirección? - me di cuenta que estábamos aparcados en la
reja de entrada a la casa, le pague al conductor. Digite el código para que se
abriera la reja y camine por la gravilla hasta la casa, con mi bolso a cuestas.
Subí las escaleras sigilosa, no quería
perturbar antes de tiempo menos a Alice que estaba pendiente del pequeño Nick,
cuando entre en mi habitación escuche el murmullo de Jasper viniendo por el pasillo
por lo que asome la cabeza, Jasper me miro confundido.
-¿Qué haces acá Bella? – se acercó para
mirarme de cerca, frunció el ceño cuando paso su dedo por mis ojeras
-¿Estuviste llorando?
-Discutimos con Benjamín, pero no importa
¿Alice está bien? – de pronto me preocupe - ¿Nick?
-Nosotros estamos bien… Es Leah la que está
hospitalizada – lo mire aterrada.
-¿Es por él bebé? – tirite no de frio sino de
miedo por el hijo de Edward
-Sí, no sé muy bien que paso, pero creo que le
harán una cesárea, nosotros no podemos ir aun por Nick. Esme esta tan
preocupada, Edward esta devastado.
-Yo iré ahora – me di la vuelta entrando al
dormitorio – me ducho y voy a estar con ellos.
Apenas
estuve lista, tome mi auto y salí en dirección a la clínica, la preocupación
crecía en mí, el embarazo de Leah no alcanzaba las treinta semanas.
Cuando entre en la recepción, me acerque al
mesón para saber el piso donde estaba Leah. Mientras esperaba que me atendieran
divise a Carlisle que llevaba dos vasos de café, me acerque a él.
-Carlisle… ¿Cómo está todo? – él me miro y me
brindo una media sonrisa.
-Bella, ya sabía yo que en cualquier momento
aparecías, aún estamos en espera Edward recién entro a pabellón para la cesárea
de Leah.
-¿Cómo esta él? – caminamos hasta una sala con
sillones donde Esme estaba sentada, el pareció pensar en cómo responderme.
-Nervioso, Edward no es fácil de interpretar
pero creo que es algo que lo tiene sobrepasado, nunca lo he visto como en estas
últimas horas – dijo Carlisle y yo asentí abrazando a Esme esta me devolvió el
abrazo, pasando su mano por mí pelo.
-Bella mi niña, eres tan dulce al venir y
estar acá… - me senté a su lado tomando su mano.
-Esme, no puedo hacer menos – sentí mis ojos
humedecerse, aun nos quedaba esperar noticias - ¿Entro en pabellón hace mucho?
-Alrededor de veinte minutos, Edward ha estado
toda la noche acá – apretó levemente mi mano, notando mi preocupación.
Carlisle dormito en el sillón mientras Esme
pasaba las hojas de una revista sin prestar real atención a lo que veía, yo por
mi parte estaba con las piernas flexionadas apoyando mi cabeza en las rodillas
para controlar mis ganas de pasearme, ya había pasado casi una hora desde que
Edward había ingresado al quirófano y no teníamos ninguna noticia de ellos.
De pronto aprecio por el pasillo sacándose el gorro
dejando entrever su despeinado cabello su expresión era desoladora y antes que
cualquiera me abalancé contra él para abrazarlo y consolarlo de la tristeza, el
cerro sus brazos en mí.
-Es
un niño – dijo apretando su abrazo.
-¿Cómo
está el bebé? – lo solté cuando Esme se acercó preguntándole.
-Lo
están tratando en la UCIN. Se llama
Noah, Noah Cullen – una hermosa sonrisa que se formó en su rostro.
-¿Cómo
esta Leah? – le pregunte acordándome de ella, ya que Edward tampoco había
comentado nada.
-En
recuperación, al parecer sin complicaciones con la cesárea. ¿Viniste sola? – me
pregunto mirándome, sus ojos estaban cristalinos pero también reflejaban el
cansancio de todas estas horas.
-Sí,
Jasper viene en unas horas más, Alice está muy preocupada – saque el celular de
mi bolsillo - La voy a llamar para que
esté tranquila, que Noah – es un nombre
precioso pensé – nació bien y está en tratamiento – me levante justo en el
momento en que Rose y Emmett entraban, por lo que salí al pasillo.
Al dar
la vuelta apoye la cabeza en la pared, respire profundo y deje salir las
lágrimas que estuve reteniendo, esas habían sido de angustia y preocupación,
ahora eran de alegría porque Noah vivía y su madre igual. Cuando pude calmarme,
le envié un mensaje de texto a Alice:
Eres tía de un hermoso varón llamado Noah
Cullen… Está bien en incubadora pero estable, Leah se está recuperando y Edward se ve
cansado pero feliz =) Bella
Decidí
hacer algo mucho más productivo por ayudar a la familia, así que salí de la
clínica hasta el Starbucks para comprar panecillos y café decente, y también
para que el viento de la ciudad borrara las huellas de mis lágrimas.
El
aroma a café tostado me envolvió, respire profundo llenando de esa esencia revitalizante.
-Buenos
días mi nombre es Jared, ¿En qué puedo
ayudarle?
-Jared,
quiero un expresso negro, dos latte y un capucchino y un vainilla, y medía docena de panecillos surtidos.
-Perfecto,
se los entregamos enseguida – le sonreí – son U$18.35
Pague los
café y espere que me los entregaran. Cuando la vibración de mi celular me
desconcentro. De seguro era Alice al leer mi mensaje.
-Aló…
-Bella
¿Dónde estás? – cerré los ojos, era Benjamín
-Benjamín,
¿podemos hablar más tarde? – enrede las puntas de mi cabello en mis dedos
esperando una respuesta.
-Bella…
- se quedó callado, solo escuchaba su respiración, yo tampoco sabía bien que
decir, sólo necesitaba tiempo…
-Está
listo su pedido – me volví hacia el mesón aún con el celular en la oreja
esperando que Benjamín me hablara lo cual no pasaba.
-Gracias
– le respondí al chico.
-Benjamín,
me tengo que ir te llamo más tarde – le corte no sintiéndome capaz de soportar
otra discusión.
Apenas
entre en la sala, me fije en Edward que descansaba sentado entre sus padres, su
mirada me siguió mientras sacaba unas servilletas y le extendía un panecillo
con el café expresso que le había pedido especialmente a él.
Le
ofrecí a los demás mientras me tomaba mi vainilla reconfortándome con el dulce
sabor cuando una enfermera se dirigió a Edward y este se levantó.
-¿Sr.
Cullen? puede pasar a ver a su hijo, además le informo que su esposa está ya en
la habitación, sólo a ella pueden visitarla otros familiares, las visitas de su
hijo están restringidas a los padres o en su defecto a los abuelos, pero no pueden ser más de dos personas.
-Me acompañas
abuela Esme – le pregunto a su madre mostrándonos una nueva faceta que nunca le
había visto, la de alguien que ama, y ese amor era para su hijo. Me enternecí
al ver a Esme tomar su brazo, Carlisle le sonreía a su hijo y esposa con un
brillo especial por lo que tome su brazo.
-Nosotros
iremos a ver a Leah –Carlisle me miro sonriendo– dile a Noah que sus tíos y
abuelo lo aman.
-Lo
haré Bella – nos quedamos mirándolos hasta que doblaron por el pasillo.
-Vamos
a ver a Leah – dijo Carlisle
-Nosotros
bajaremos a comprarle unas flores y esas cosas, con el apuro no trajimos nada –
Comento Emmett abrazando a Rose.
-Los
alcanzamos…
Entramos
en la habitación de Leah, ella estaba mirando el techo, al parecer no se
percató de nuestra presencia, por lo que Carlisle carraspeo. Ella giro la
cabeza hacía nosotros pero no hubo ningún cambio en su expresión.
-Leah
¿Cómo te sientes? – Carlisle se acercó a la cama y yo me quede apoyada en la
pared, algo en la expresión de Leah me tenía inquieta.
-¿Dónde
está Edward? – pregunto en un susurro
-Fue
con Esme a ver al pequeño Noah – ella giro la cabeza hasta el ventanal,
Carlisle me miro extrañado - ¿Quieres que le digamos algo? ¿Necesitas algo? –
Le volvió a preguntar Carlisle - Leah
negó con la cabeza pero no volvió a mirarnos, por lo que nos sentamos en el
sillón de la habitación, sin decirle nada a ella ni hablar entre nosotros.
Al cabo
de unos minutos entraron Emmett y Rose cargando un hermoso arreglo floral y un
enorme peluche con globos que decían “Es un niño”. A Leah no le pareció importar
así que nos miramos nuevamente ahora los cuatro, sin entender el porqué de la
indiferencia de Leah, sólo nos quedamos ahí esperando que volviera Esme y
Edward.
-¿Le
avisaron a mi familia? – pregunto Leah después de casi media hora de silencio.
-Aún no
– respondió Carlisle - ¿Quieres que los llamemos ahora?
-No, es
mejor así – fue la respuesta de Leah. Con Rose nos miramos y vi en sus ojos la
misma inquietud que yo tenía… ¿Por qué Leah no pregunta por su hijo?, ambas
miramos hacia la cama, cuando ella comenzó a agitarse comenzando a llorar, nos
pusimos de pie para ver que le pasaba, pero al vernos comenzó a gritar, tiro de
su mano tratando de sacarse la vía intravenosa, Rose le tomo la mano, mientras
yo accionaba el botón de emergencia para que viniera una enfermera, a partir de
ese momento todo se transformó en un caos, todo eran gritos y llantos, Leah
tiraba de su pelo y rasguñaba a quien estuviera a su alcance, salimos de la habitación, mientras medicaban a
Leah para que se calmara.
-Nosotros
nos vamos, tenemos que pasar por Emma al jardín y creo que no somos mucho
aporte – comento Rose.
-Vayan
hijos, cualquier cosa le avisaremos – Rose beso la mejilla de su suegro y
Emmett abrazo a su padre.
-Cuídate
Bells… - me abrazo Emmett – cuidado con la loca – termino susurrándome al oído
– le respondí golpeando su brazo.
Cuando
se perdieron por el pasillo llegaron Esme y Edward. Carlisle abrazo a su esposa
que parecía que en cualquier momento colapsaría y así fue en los brazos de su
esposo lloro varios minutos, hasta que Carlisle decidió llevársela para que
descansara.
-Edward
¿Te llevo a casa para que puedas descansar? – me volví hacia él esperando una
respuesta.
-¿No es
una molestia? – me arrodille para mirarlo.
-Edward,
no es molestia… me siento un poco frustrada en no poder hacer más – me mordí el
labio ansiosa de pronto por salir de acá y dejar atrás el comportamiento de
Leah
-Con
esto haces mucho Bella, el que estés acá – sus ojos esmeralda me traspasaron y
vi sinceridad en ellos– después de todo lo que ha pasado.
-Eso no
importa Edward, lo importante es que Noah salga de su gravedad y pueda estar
pronto con nosotros para que lo llenemos de besos y cariño… - me imagine teniendo al pequeño en brazos…
-Bella,
eres un ángel – me dijo y antes que me pusiera más colorada le tendí la mano
para que saliéramos luego de aquí.
-Vamos
porque de un momento a otro te caes de cansancio – me tomo la mano, y como
tantas otras veces mi corazón se desboco.
Estábamos
esperando el elevador aún de la mano, para irnos hasta el estacionamiento donde
tenía mi automóvil, las puertas se abrieron y fue Benjamín quien nos cerró el
paso.
-¿Benjamín
que haces acá? – le pregunte soltándome de la mano de Edward.
-Alice
me conto… fui a buscarte allá – de pronto se quedó callado mirándome y después
a Edward quien puso sus manos en mis hombros.
-Lo
siento Edward – dijo Ben, tomando mi mano y jalándome hacía él, me solté de su
agarre molesta por su actitud posesiva, podía entender su molestia, pero no era
ni el lugar ni el momento.
-Ya
está todo controlado Benjamín gracias por preocuparte – le respondió Edward,
mirando nuestro intercambio.
-Benjamín,
voy a dejar a Edward a su casa… - me mordí el labio por la gélida mirada que me
dio – me esperas en casa de Alice por favor, para que hablemos.
-Está bien
– entramos en el estacionamiento y yo camine presurosa hasta mi auto molesta.
-¿Están
peleados? – pregunto Edward una vez que salimos del estacionamiento.
-Algo
así – le respondí no podía darle una respuesta concreta, ya que sin siquiera
quererlo él era el causante de todo este show.
Cuando
llegamos a su edificio aparque afuera de la entrada, Edward se volvió a mí y
acaricio mi mejilla.
-Gracias
Bella.
Acá
vamos de nuevo… ¿se acaba el paraíso para Bella? ¿Qué opinan ustedes?... ¡Siii!
Quiero saberlo todo…
Las
y los quiero montones
Con
mucho amor
Axavenus
8 comentarios:
Espero sus comentarios...
Ustedes saben son mi sueldo =P
Oh dios.....quedo sin habla sin aliento y sin pastillas para los nervios.....paraiso ??? yo diria que es casi desierto.....las cosas toman un rumbo muyyyyyyy interesante....las actitudes verdaderas de las personas aparecen y benjamin esta mostrando un lado posesivo que no le agrada a bella.....huelo peligrooooo......
es como siempre una delicia leerte asi que sera hasta el adelanto angustiso....
PS. Leah esta demente deberia internarla y alegar divorcio por problemas psiquiatricos y por intentar dañar la vida de un no nacidoo y su hijo....que clase de mujer ....solo una demente sin corazon....
hla axavenus!!
no creo q bella haya estado viviendo un paraiso mas bien, algo mas como una tortura, aunque halla pasado momentos unicos con benjamin, no se la veia muy comoda tratando de reprimir sus sentimientos y deseos, lo cual la llevo a el afortunado sueño que, destruyo casi por completo las esperanzas de benjamin y libero un poco a bella...
debo mencionar que no me gusta la actitud de ben hacia bells, la trata como si fuera un trofeo, muy posesivo y celoso...
por otro lado me preocupa mucho la actitud de leah al no preguntar por su bebe y su deseo de que su familia no sea avisada de su parto,,, y ni que decir de el ataque le dio cuando la fueron a ver...
en fin el cap estuvo muy bueno y espero ansiosa el prox, para saber de que van hablar ben y bells, ojala dejen las cosas en claras y q ben no se haga ezperanzas ni falsas iluciones q solo lo lastimaran a el y a bells..
bss... nos vemos!!! y muchas bendiciones para ti, y para tu hermoso angelito...
Wow como haces esto lo dejas en la mejor parte....!!!!
Y bueno con respecto a tu pregunta, se que no es de buena educación responder con otra pero ¿Pero Bella estaba en un paraíso acaso? Jejeje bueno es ps aparentemente si estaba bn Con Ben, pero ps no es algo completo no se sentía plena, xq ps sus sentimientos van hacia Ed...
Estoy de acuerdo con Silvia, a Leah deben internarla en una clínica siquiatrica eso ya no es normal en una persona...
Bella tiene que tener mucho cuidado con Ben, esta sacando las garras con esa manera de ser posesiva...
Uy esto esta cada vez mejor!!! Jejeje quedo esperando ansiosa el próximo capi...!
Besitos a Annie y a ti!
Pues la verdad amiga es que prefiero mil veces el infierno al calvario de vivir en el paraiso sin mi amado Edward aggg!!! amiga te luciste al fin!!! sisisisisi soy muy cabrona jejeje pero me encanto que se peleara con Benjamin él no es para ella a pesar de todo aun continuo molesta por su actuar la primera ves ¿me entiendes? claro que si!!! tu eres la escritora jajaj te quedo de pelos y como lei por ahi esta historia esta creada exclusiamente parea llevarns al loquero ¡Mi niña! estoy que reviento de tanta ansiedad!!!
Paraíso?? Está mujer está tratando de tapar el sol con un dedo, se inventó castillos en el aire, para olvidar, para nublar sus sentimientos x aquel fantasma... está jugando con Ben para no sentir por Edward... claro Ben ta dejando ver lo mejor de sí (nótese el sarcasmo)
No siento lástima x Ben, él insistió, pero ella le dio una oportunidad, pero a pesar de todo el amor que siente x Edward es más fuerte... siempre...
Ha esperar que sucederá ahora...!
Excelente cap... Me encantó ! Besines
¿Les he dicho que Benjamín no me agrada? jajajaja pero esta vez se pasó, despues de todo el show ue el armo, cuando se ve vencido, culparla practicamente a ella, como si ella estuviese arruinando su "tiempo juntos" como dice el... entiende, que el dos segundos junto a Edward, son mas preciados para Bella que todo un fin de semana contigo :P
¿No entiende él que Bella viene de una relación tormentosa? si acepto estar con ella, a pesar de sus antecedentes, debe saber tener paciencia tambien.
Pero lo más genial de todo jajajjajajajja es que no puedo evitarlo, sé que soy mala, realmente no puedo imaginar nada peor para un hombre que su mujer tenga un sueño erótico con otro mientras duermen juntos... y no cualquier hombre y no sólo erótico, que más encima le diga que lo ama... jajajjaja lo compadezco.
Pensar que en esos momentos Edward esta sufriendo, al otro lado de la ciudad... snif!
Que bien entiendo esa sensación de libertad que dice Bella, cuando estás con alguien que no ama, pero, en el fondo, aceptas en tu vida por no estar sola... sin embargo, cuando esa persona se va, es un alivio, dejas de fingir es un alivio.
Ooooh, Bella compró el panecillo de canela pensando en él y ¿Recuerdan cómo lo disfrutó él en el capi pasado? jeje los detalles.
El final es tan tierno, eso de que lo lleve, como una intimidad que es intrinseca en ellos, a pesar de que su esposa esté postrada y loca, su lugar está junto a Bella, ella es la que lo sostiene.
Interesante capi, porque toca dos temas importantes en la historia, el quiebre con Benjamín y el reencuentro conEdward, el momento justo!!!
Muchos abrazos!!!
Rocío.
Primero que nada tu beba esta cada vez mas grande y hermosa!!!
Segundo, Porque nos haces eso??? :(jamás pensé que el adelanto fuera el final del capítulo :O me quede más clavada que nunca jajajajaja pero me encanto todo.
Pobre Benjamín si tenía razón por los celos, aparte de que el amor de Bella nunca fue de él.
Me quedo la duda del por qué no tolera Rose a Edward.
Que feo caso lo del sueño por la forma en que se entera Benjamín de lo que realmente siente Bella. Aunque él es el que quiere quedarse y va a salir súper lastimado. Quien no sueña con ese bombón, no la culpo jajajaja lastima que la despertaron.
Pero ya era hora que Bella se diera cuenta de que al que realmente ama es a Edward (bueno espero que se haya dado cuenta) aunque era obvio pero para que hacerse falsas ilusiones con el otro si está casado. Ojala y termine con Benjamín para que no lo siga lastimando.
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