Capítulo 15 - Otoño

Capítulo 15 –  Otoño

BPOV

Arranque mi auto, y maneje como una autómata por las calles de NY, la última visión de Jacob, su calor, el termino de lo que fuimos, lo que no pudimos ser, fue arrebatadoramente fuerte y punzante en mi interior.

Deje en automóvil en la entrada, sin ser capaz de llevarlo al estacionamiento, entre en casa subí las escaleras reuniendo todas mis fuerzas para llegar a mi refugio antes de derrumbarme.

Lágrimas, gruesas y terribles derrame por muchas horas, ovillada en mi cama, destrozada por perder a mi amigo, a mi hermano… el dolor abriéndose en mi pecho, llorando todas las pedidas en mi vida, todo el abandono, la amargura de la soledad. Él es lo último que tuve de familia…

Un grito desgarrador rompió el aire frente a mí, impulsándome hacia adelante, gimoteando de dolor por la pérdida… no sé si en el segundo que el sonido rompió el aire o en el momento que mi pecho se expandía para perder todo lo de mi interior… sentí unos fuertes brazos envolverme, el perfume me recordó mis temores y el por qué las cosas se habían acabado cuando en realidad jamás habían comenzado.  Me aferre a esos brazos como si toda mi vida dependiera de ello, luchando con la oscura soledad que se empeñaba en apoderarse de mi...  el cansancio y el letargo se llevaron mi conciencia en intervalos donde las palabras de mis amigos llenaban de susurros mis oídos… cuando mis las lágrimas se secaron y los sollozos se ahogaban casi imperceptibles en mi boca, afloje el agarre necesitado de los brazos de Jasper…  sin embargo no me soltaron solo me acomodaron con suavidad en la cama, otros pares de brazos más pequeños me arroparon y las cándidas manos de mi mejor amiga acariciaban mis mejillas húmedas con cariño…

Me desperté sobresaltada, la semioscuridad y el vacío imperante en mi sueño me hizo remecer. Trate de enfocarme me gire lentamente en la cama sintiendo la hinchazón acuosa en mi nariz. Incorporándome note que no estaba sola en mi cama, en ella estaba Alice durmiendo con el ceño fruncido y un gesto compungido no propio de ella. La puerta estaba abierta proyectando la luz del pasillo hacia el dormitorio. Me levante lentamente para no despertarla, me metí al baño, necesitaba orinar, prendí la luz después de cerrar la puerta para no molestar a mi amiga.

El reflejo que me devolvió el espejo, era de lo más lamentable, mis ojos hinchados, mi nariz roja, el pelo enmarañado… y lo peor de todo una mujer que realmente no reconocí… no por mi apariencia sino por mi postura, por la determinación en mis ojos y por qué esa es la nueva Bella, ya no podía seguir sintiendo más tristeza.

Baje las escaleras lentamente camino a la cocina, necesitaba tomar agua. La luz estaba encendida entre sigilosamente, en la isla de la cocina, frente a un tazón se encontraba Jasper con la cabeza entre las manos. Me sentí tan miserable y las inacabables lágrimas se asomaron en la comisura de mis ojos… El lentamente levanto la cabeza y fijo su mirada azul en mí… suavemente se levantó sin dejar de mirarme y yo termine de acercarme y abrazarlo.

-Preciosa me tienes tan preocupado….- beso el tope de mi cabeza apretando un poco más su abrazo en mi -¿Qué paso? Llegamos y tu gritabas, no sabíamos lo que había pasado y no respondías – aflojo su agarre levantando mi barbilla para mirarme - ¿me perdonas? – Lo mire extrañada y en sus ojos se veía la culpabilidad.

-Jazz… no tengo nada que perdonarte, tú no has hecho nada malo – me abrazo de nuevo y yo hipé – es verdad… sé que me moleste…

-¿Por qué llorabas? ¿Qué te paso?... pequeña por favor dímelo

-Termine con Jacob… - me mordí el labio y me solté de su abrazo para ir a la alacena para sacar una botella de agua, saque la tapa y tome desde la botella, me  volví para mirarlo y  sus rubias cejas se juntaron.

-¿Te hizo daño?- su expresión se volvió furiosa – te juro que si te toco un solo cabello lo dejo bueno para nada – le sonreí enternecida por su preocupación.

-No me hizo nada… es solo que es doloroso, él es importante en mi vida, no puedo dejar de pensar lo que perdí y que es lo único cercano a la familia que tuve – controle mi expresión, la herida de mi corazón es reciente. Jazz pareció entender mi dolor, porque me tomo la mano y sin decir más caminamos hacia mi dormitorio…

-Jazz… perdóname por gritarte en la mañana – me sonrió y sus ojos brillaron

-Bella cariño, me lo merecía… ¿puedes entender que no quería entrometerme? Pero era más fuerte que yo– ahora fue mi turno de sonreír, estábamos en la puerta de mi dormitorio.

-Lo sé, te preocupas por mí. Pero a pesar que valoro tu cariño y protección, necesito aprender a vivir mi vida. – El asintió caminando hacia Alice que continuaba durmiendo, acaricio tiernamente su mejilla. La mire durmiendo profundamente, ella era así, toda energía durante el día pero en la noche nada la despertaba.

-Lo mismo me dijo Alice… - reflexiono un momento mientras yo me sentaba en la cama subiendo las piernas para abrazarlas – ella estaba muy preocupada… - guardo silencio mirando a su esposa con tanto amor que me sentí tan pequeña contra la fuerza de sus sentimientos – Bella, no quiero que vuelvas a decir, que ese tipo era lo único que te quedaba de familia – frunció el ceño – nosotros somos tu familia, y te amamos de esa manera.

Las lágrimas traicioneras cayeron por mis mejillas sin tener la fuerza suficiente de responderle. Yo sabía que era verdad, que ellos eran mi familia, y me aman de esa manera. Jasper se agacho mirando a Alice y le beso suavemente los labios…

-La dejare dormir contigo, querrá estar aquí cuando amanezca

-Yo cuidare de ella, como ella lo hace conmigo – le susurre – ve a dormir.

Rodeo la cama y espero que me metiera entre las cobijas junto a Alice, me beso la frente con ternura casi paternal.

-Te quiero preciosa… - trague abrumada por el cariño y el recuerdo de mi padre.

-También te quiero Jazz… también te quiero. - Lo vi salir del dormitorio y cerrar la puerta tras él.

Me acomode en el delgado hombro de mi amiga, cerrando los ojos esperando  con todas mis fuerzas que cuando los abra, la tristeza disminuya aunque sea un poco.

…

Estaba segura que la intensidad de la mirada del león era real, aunque sabía que soñaba, los ojos fieros estaban fijos en mí, su cola serpenteaba mientras sus acompasados movimientos iban y venían… a pesar de que debería sentir terror… era la presa… estaba maravillada con su elegancia, su porte, su piel, todo en él era atrayente sus ojos me tenían hipnotizada. Estaba segura que sería la una presa fácil, no me resistiría a tal espécimen aunque me absorbiera la vida… de pronto la luz cegadora del sol se abrió paso entre la vegetación encandilándome… me sobresalte porque sentí la cercanía, el crujir de la grama seca… ahí lo vi, agazapado listo para hundirse en mi cuello… pero había algo diferente… sus ojos… sus ojos ya no eran dorados… ¡eran verdes! 

Me sobresalte en la cama, abriendo los ojos bruscamente… sofoque un grito cuando me topé con el verde de otros ojos… menos felinos, más astutos… los ojos de Alice.

Ella me miraba intensamente aún estaba apoyada en la almohada, sus facciones hermosas y delicadas me enternecieron haciendo olvidar mi sueño, nos miramos en silencio unos minutos y sus ojos se tiñeron de lágrimas, las enjuago con sus manos y suspiro… me volví a acostar sobre la almohada y la abrace… ella lloro silenciosamente apoyada en mi hombro, yo sabía cuál era su tristeza, yo se la había provocado y me sentía terriblemente culpable.

-Ali… no llores más por favor – acaricie su sedoso cabello negro.

-Bel… bella – hipo mientras levantaba la cabeza para mirarme – est… ¿estás bien? – suspire acomodándome en la cama, mire el techo blanco de mi habitación

-No lo sé… ya no siento el dolor desgarrador, pero si es como si algo faltara – me mordí el labio para controlar el temblor de mi barbilla.

-¿Qué te puso así?... me tenías tan asustada, Jasper estaba desesperado pensando que había sido él… - sus lágrimas rebotaron en las sábanas.

-Jasper me conto… anoche. Discúlpame amiga… es que fue más doloroso de lo que nunca me imaginé, si hubiera sabido que resultaría así, no hubiera ido ayer porque no estaba del todo bien, pero lo decidí en el momento… Termine con Jacob – le dije al final tomando aire – fue jodidamente doloroso… - Ella me miro y se acurruco junto a mí.

-Sé que es doloroso amiga, pero era necesario hacerlo… aunque no fue de la mejor manera, podrías habernos prevenido… ¿Qué hubiera pasado si él se torna violento nuevamente? 

-Perdóname por eso… - nos quedamos en silencio por un rato - ¿sabes lo que más me asusta de esto?

-No lo sé – dijo en un susurro, me extrañe con su respuesta pero lo deje pasar

-Que duele mucho y ni siquiera lo amo… o sea lo quiero, es importante en mi vida, pero no lo amo… -cerré los ojos - ¿Cuánto duele cuando terminas con alguien que si amas? -Se sentó apoyándose en la cabecera de mi cama mirándose las manos, de verdad su comportamiento es extraño.

-Mil veces más doloroso y desgarrador… me imagino que eso sentiría si en algún momento Jasper me dejara – sus ojos se llenaron de lágrimas otra vez y me miro entre sus pestañas… quedándose callada, eso definitivamente era extraño en Alice, por lo que me preocupe de verdad cuando caí en cuenta que esa no es la actitud común de mi amiga…

-Alice, ¿Está todo bien? ¿Qué pasa amiga? – Trato de sonreír, fallando estrepitosamente… - Amiga, sabes que puedes confiar en mí… ¿te sientes bien?

-También tengo miedo Bella… - le tome las manos sentándome frente a ella en la cama

-De que tienes miedo amiga…

-Tengo miedo a no poder darle a Jasper lo que el más quiere… o sea nosotros queremos tener hijos, tú lo sabes – me miro con un brillo especial - ¡tengo un retraso de 8 días!

-¡Wow!... Alice pero eso es genial – de pronto caí en cuenta en su confesión - ¿De qué tienes miedo entonces?... ¿No es lo que quieres?

-Si es lo que más quiero… ¿pero si no lo estoy?... yo siento que si… pero no logro verlo claro…

-Alice, hagamos un test de embarazo y comprobemos… si no sale positivo tienes que seguir intentando, no siempre estas cosas se dan inmediatamente. –me abrazo fuertemente y se levantó, salió corriendo hacia el pasillo, volvía mi amiga…

Me levante respirando hondo, camine metiéndome en el vestidor a buscar ropa, antes de ducharme. Mire hacia la cama que era un revoltijo de mantas. Me fije en el suelo que mi celular estaba ahí, lo levante, estaba descargado, así que tome el cargador del velador para conectarlo…

-¡Acá los tengo! – Salté con el grito de Alice y me volví hacia ella que sostenía una bolsa y se metió al baño – ven Bella, no puedo hacer esto sola, necesito tu apoyo.

La seguí al baño sobre la encimera del baño desparramo la bolsa, me acerque a mirar y eran unos treinta test de embarazo.

-¿Qué demonios estabas pensando Alice?... desabasteciste toda las farmacias de la ciudad

-No me molestes ahora, pásame cualquiera… - tome una caja rosada y se la extendí. Se sentó en el inodoro para hacer el test, yo la miraba divertida. Termino de hacerlo y lo apoyo en la encimera se lavó las manos y nos sentamos ambas en la orilla de la tina, la abrace - ¿Cuántos minutos son? – Tome la caja del suelo y la leí.

-Tres minutos, si es positivo tendrá unas líneas cruzadas, si es negativo tendrá una sola línea – asintió con la cabeza. Esperamos en silencio los eternos minutos y espere que ella se moviera y no lo hizo así que me levante para mirar el test - ¿quieres saber la respuesta? –le pregunte sin mirarla

-¡Bella! Sí por favor dime… que no puedo más

-Tengo que decirte que tendrás que salir de compras… porque no te alcanzaran 9 meses para comprar todo – me miro con los ojos muy abiertos e hizo el impulso de saltar pero la tome por los brazos – no puedes saltar…

-¡Estoy embarazada!... ¡Estoy embarazada!... – nos abrazamos las dos felices – tengo que decirle a Jazz, pedir la hora con mi ginecólogo y hacer todo, planificar el cuarto del bebe, los nombres, los padrinos… todas las cosas necesarias…

-Alice, cálmate – la tome de los hombros nuevamente – debes ser más relajada, ese nivel de estrés no es bueno… ahora ve a ducharte, después llama a Jasper le invitas a almorzar y le cuentas, después pides la hora al médico… una cosa a la vez – Me volvió a abrazar.

-Bella, estoy tan feliz que estés conmigo ahora, de verdad que eres como mi hermana… y adoro que seas mi familia.

-Te quiero enana hiperactiva… y adoro a tu porotito que crece dentro de ti. Ve a ducharte mientras yo guardo el arsenal de test de embarazos.

Salió riendo de la habitación, me duche pensando en lo que haría esta semana, necesitaba organizarme en escribir y continuar mi historia, además de ver las alternativas de trabajo que postule en la universidad de NY

Había pasado una semana desde la noticia del embarazo de Alice, mi querido amigo estaba más que feliz, sus ojos brillaban y la felicidad que proyectaba era tan evidente que todos en casa estábamos igual. Rose se enteró cuando fue a visitarnos lloramos las tres emocionadas por la noticia y la alegría que nos embargaba. Durante esta semana Alice y Jasper fueron al médico que les tomo los exámenes e hizo la ecografía mostrando a su pequeño o pequeña… no pude evitar ponerme nostálgica…

Aún estaba triste por lo de Jacob a eso sumarle que no me sentía con ánimos de enfrentar a Edward, quien me llamo varias veces en la semana pero desistió al no responderle ninguna llamada. No podía negar que le extrañaba y anhelaba más de lo que se considera correcto escucharlo, la atracción que siento por él es latente, pero nada podía hacer…

Alice había organizado un almuerzo familiar, en un restaurant para dar la noticia a la familia completa. Era todo un suceso, un nuevo Cullen llegaría en al menos siete meses. Ahora estábamos acá entrando al restaurant donde los demás Cullen nos esperaban en la mesa, incluyendo al hombre que se colaba en mis sueños y por supuesto con su novia.

Saludamos a la familia mientras nos sentábamos. Esme y Carlisle miraban felices a su familia, evidentemente ellos disfrutaban de estos momentos… No podía evitar sentirme un tanto incomoda, si bien me consideran su familia y yo también me siento bien con ellos… esto es tan íntimo. Mientras nos tomaban los pedidos mire a Edward sentado junto a Leah conversaba con Jasper. El devolvió la mirada, pero sus ojos eran inexpresivos, él estaba molesto y yo lo sabía. Pero sabía que era la mejor manera de manejar lo que sentía por él…

-Bueno ya que estamos acá disfrutando de una hermosa comida en familia, creo que es el momento de brindar – dijo Jasper por sobre la conversación de la mesa, todos nos fijamos en él y guardamos silencio – Alice amor – ella le tomo la mano a Jasper y le extendió una bolsa de regalo a sus padres.

-Mamá, papá… necesito que abran este regalo – Ellos la miraron extrañada y sacaron el retrato que había en la bolsa. Todos miramos como sus ojos se abrían de la sorpresa… - ¡felicidades serán abuelos!

-Hijos es maravilloso… - les dijo Esme mientras Carlisle miraba la fotografía de la ecografía fascinado. Todos comenzaron a abrazarlos y felicitarlos... 

-Bueno ahora el que queda invicto es Edward ¿Cuándo nos harán los honores con Leah? – pregunto Emmett, esperamos la respuesta de parte de él.

-Después de la boda… - dijo Leah – mostrando su mano un hermoso anillo hacia el resto de la familia… cerré los ojos tratando de controlar mis confusas sensaciones – me lo pidió hace tres días y acepte – justamente hace tres días dejo de insistir con sus llamadas… trague en seco, levante la mirada para toparme con la de él, hasta el momento no había dicho nada para rebatir a Leah.

-Si le he pedido que sea mi esposa – dejo de mirarme para brindarle una rápida mirada a su ahora prometida – y ella ha aceptado.

Todos los demás guardaron silencio con la repentina noticia…

-Bueno entonces tenemos que seguir celebrando – dijo Carlisle rodeando la mesa para abrazar a su hijo y posteriormente a su nueva nuera. Esme sollozaba de alegría mientras abrazaba a Edward y besaba su mejilla.

-¿Para cuándo se quieren casar? – pregunto Alice con una extraña expresión en la cara…

- Dentro de 3 meses a lo mucho – respondió Leah – Ya vivimos juntos así que en realidad necesitamos formalizar nuestra relación ¿verdad mi vida? – beso la mejilla de Edward

-Así es… de eso queríamos hablar con ustedes mamá… ahora no se si Alice querrá participar en la organización con la noticia de mi nuevo sobrino.

Ellos siguieron hablando y conversando… yo quería salir de ahí, pero tenía que soportar por mis amigos, más que mal es su familia… el problema era mío al mezclar las cosas… ahora era más inalcanzable que nunca… en el fondo de mi cabeza resonó la frase  "La peor forma de extrañar a alguien es estar sentado a su lado y saber que nunca lo podrás tener"  el golpeteo de mi corazón fue un tanto doloroso, quizás por todas las cosas que había pasado en esta semana…  me sentí sacudida por el hombro cuando enfoque hacia el lado mirando a Rose.

-Bella ¿estás bien?... estas muy pálida – la mire pestañeando rápido y negué con la cabeza.

-Voy al baño… - me levante sin mirar a nadie y camine hacía el baño de mujeres, entre y moje mi cara con agua helada, tenía una necesidad imperiosa de llorar, pero debía controlarme… aspire fuerte y me acomode el pelo. Abrí la puerta del baño para salir y el perfume delicioso de Edward lleno mis sentidos, mi corazón anhelo tanto el aroma aunque sea una tortura, mire a mi alrededor y ahí estaba apoyado en la pared mirándome, avanzo a hacia mí y me tomo del brazo, llevándome.

-¿Qué haces?... – mire alrededor cuando cerró la puerta tras él, estábamos en una especie de patio trasero con varios árboles. Me volví hacía él – Edward, ¿Qué quieres?

-¿Por qué no me contestaste?... – se acercó a mucho más podía ver sus el destello cobrizo en sus oscuras y largas pestañas– Te extrañe tanto esta semana Bella… - cerro los ojos y respiro hondo - Quería pedirte disculpas por mi comportamiento, el domingo pasado…

- ¡Déjame!... – se alejó un poco de mi pasando su mano por el pelo, dándome la espalda -  disculpas aceptadas… ahora me voy.

-Bella por favor, de verdad no quiero que estemos enojados… He necesitado de ti – se acercó nuevamente y acomodo mi pelo detrás de la oreja – volvamos a ser amigos… te prometo que me portare bien – suspire, yo de verdad no quería ser su amiga, ¿pero qué otra alternativa tenia?

-No lo creo Edward… ¿quieres que te felicite?... bueno felicidades por tu futuro matrimonio Edward, de verdad espero que seas muy feliz – respire profundo y lo trate de esquivar para irme nuevamente pero otra vez lo evito…

-Bella, necesitamos hablar… el domingo perdí el control, pero te prometo, que ahora será distinto… juntémonos otro día a conversar…

-Ya no sirve de nada Edward, las cartas están sobre la mesa… por el momento solo puedo pedirte que respetes mi espacio, y yo respetare el tuyo… - me miro con asombro, baje la mirada y camine hacia la puerta, mire los arboles… estos ya tomaban la tonalidad café rojiza del otoño… -aunque no puedo negar que te extrañare - Cerré la puerta tras de mí y volví a la mesa. Jasper y Alice estaban de pie con sus abrigos esperándome… llegue a ellos tome mi abrigo, me despedí de Esme y Carlisle y salí al frio aire otoñal de Nueva York.

…

-¿Estas nerviosa? – me pregunto Jasper cuando le toco la luz roja, le mire y sonreí.

-Un poco, hace alrededor de un mes que no sé nada de él, será extraño. ¿Esto es normal para una pareja que se divorcia? – sonrió y continuo conduciendo.

-La verdad que los términos son variados de acuerdo a cada pareja. Algunas personas no puedes estar en la misma sala y solo litigan los abogados, pero en tú caso es mucho más fácil… ya tiene el acuerdo del contrato pre matrimonial, es mucho más cómodo y ágil.

-Es verdad… después de estas firmas seré soltera nuevamente – suspire.

-Así es… espero que no caigan tantos pretendientes… ya basta con el desconocido que te manda rosas todas las semanas – se carcajeo – lástima que a Alice le da asco el aroma ahora – Reí con ganas porque era verdad, ya no puede entrar en mi habitación.

-Si supiera quién es, le pediría que cambiara el tipo de flor porque de verdad también me tiene un poco mareada el aroma…

-Ya llegamos… es la hora querida Bella.

Salimos del coche y caminamos por el estacionamiento hasta el ascensor del edificio… mi estómago se revolvió cuando pensé en que él estaría acá y lo vería, lo había extrañado tal como le había dicho. Durante este mes evite ir a almorzar los domingos donde Esme para no verlo disfrutando con su novia, y para compensar mis ausencias iba un día a la semana a cenar con Esme y Carlisle…

Entramos en una sala con una gran mesa ovalada, el ventanal daba hacía los edificios majestuosos del WTC, la vista es espectacular. Me senté donde Jazz me indico a esperar.

-Buenos días… - La voz de Jake lleno la sala y me levante sin controlar mis impulsos y rodee la mesa para abrazarlo – Bella, estas preciosa – me devolvió el abrazo cuando otro hombre bajito entraba detrás de él a la sala y se sentaba.

-Te extrañe, siempre extrañare a mi mejor amigo. – le susurre contra su hombro.

-Yo también te he extrañado pequeña – me guio de vuelta a la silla y él se sentó junto a su abogado… Jasper me apretó la muñeca  antes de hablar.

-Isabella, ya ha firmado los papeles del divorcio y espero que tú Jacob también lo hagas – me contuve de reír por la voz profunda y profesional de Jasper, este  abrió la carpeta con los documentos y yo me recargue en la silla mirando alrededor.

-Sí, ya los hemos leído y están perfectos – respondió Jake mientras su abogado le pasaba una carpeta a Jasper – sólo queda saber qué hacemos con la representación que tengo de las acciones de la empresa de Isabella –le preste atención, eso era lo principal que quería hablar hoy.

-Jacob, he hablado con Jasper y la verdad es que quisiera que te quedaras con las acciones en su totalidad… quiero que te hagas cargo de ellas como dueño y accionista de la empresa de mi padre…

-Bella, no puedo aceptar, es el trabajo de toda la vida de tu padre… puedo representarte pero esas acciones deben ser tuyas.

-Jacob, tú podrás manejar mejor la empresa de esa forma, lo único que te puedo pedir es que sigas la línea de trabajo de mi padre, procura el bienestar de sus trabajadores y hacer crecer la empresa. ¿Lo harías por mí?

-Bella, es demasiado dinero, no es justo… - miro a Jasper quien obviamente compartía la visión de Jacob, suspire resignada.

-Jacob, acéptalo… ahora no puedes ejercer la abogacía, por favor… no puedo confiar en nadie más que tú, conoces la empresa, tienes ya acciones en ellas… y yo no entiendo nada del mercado de capitales para hacerla crecer… por favor.

-Hagamos este trato, yo trabajo con las representaciones de las acciones y de las ganancias tu obtendrás el 70%  eso dará estabilidad a la corporación y los demás accionistas no sentirán amenazados sus capitales, esto podemos manejarlo en un plazo de tres años y posterior puedo ir comprando tus acciones en paquetes parciales… de esta forma puedo manejarlo, de otra manera no. Me conoces lo suficiente como para saber que no me gusta tener algo que no he ganado por mi esfuerzo. – Le sonreí entendiendo su punto de vista y lo que me dijo del mercado de capitales, mire a Jasper quien parecía satisfecho con la respuesta de Jacob.

-Me parece una propuesta muy buena Isabella – Dijo Jazz mirándome - ¿estás de acuerdo?

-Si es lo que quieres y es lo mejor para la empresa, yo no tengo problemas.

-Entonces ahora, firmaremos en contrato y redactare el convenio comercial de acuerdo a lo conversado Jacob, te lo enviare para que los revises con tus abogados - Jasper y el abogado intercambiaron documentos mientras nosotros conversábamos.

-Quiero devolverte las llaves de tú departamento Bella – me extendió el juego de llaves sobre la mesa – yo ya me fui a Seattle, solo he venido para firmar los papeles y los acuerdos. Puedes volver a tu casa cuando quieras

-Gracias Jacob – tome las llaves desde la mesa, sonriéndole – espero que en Seattle puedas encontrar la felicidad…

No sé si fue porque ya no era una mujer casada, o porque las cosas comenzaban a ser distintas pero la perspectiva de mi vida se presentaba como un desafío… el aire arremolino las hojas en el Central Park, sonreí porque las estaciones intermedias representaban mi vida. Mi celular vibro en el bolsillo de mi abrigo lo saque y mire  el número que no reconocí.

-¡aló!

-¿Srta. Swan?

-Con ella… ¿con quién hablo?

-Buenas tardes, usted habla con Peter Odom, encargado de desarrollo pedagógico en la universidad de Nueva York – contuve la respiración –Su postulación para la pasantía catedrática en Filología ha sido aceptada.

-Esa es una estupenda noticia Sr. Odom – me contuve de gritar de alegría había postulado al cargo cuando llegue a NY y ahora era una hermosa oportunidad para comenzar esta nueva etapa.

-Esta pasantía es de medio tiempo, así que esperamos se pueda presentar en nuestras oficinas el próximo jueves. Mi secretaria le enviara vía un correo electrónico los antecedentes de la cita para ese día.

-Muchas gracias

-Buenas tardes Srta. Swan.

Me deje caer sobre la banca más próxima, jubilosa por estas nuevas oportunidades. Llena de alegrías y sueños los mismos que he tenido desde hace mucho, ahora nada me ataba para cumplirlos…

Estaba entrando al vestíbulo cuando Alice, venia hacia mí con una enorme sonrisa…

-¡Bella! Nuevamente te ha llegado un ramo de rosas hermoso – me tomo de la mano para llevarme al living – pero ahora viene con algo más.

-¡Por fin una tarjeta! – me reí por la emoción que le causaba una tarjeta a Alice.

-No tonta… - ya entrabamos en el living cuando un arreglo más grande que los anteriores estaba frente a mí... – ¡ahora terminara el misterio! ¿Qué te parece Bella? – la mire mientras se apretaba la nariz con la mano por el olor a las rosas, lentamente las flores dejaron de ocultar al mensajero dejando ver unos conocidos y amigables ojos tras los níveos pétalos.

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Estoy muy contenta con sus comentarios, alertas y favoritos…. ¿Qué les ha parecido el capítulo?

Muchas gracias…. Por todo su cariño.

Un beso,

Axavenus