Capítulo 7 - Rompiendo Promesas

Capítulo 7 – Rompiendo Promesas

BPOV

El comedor estaba iluminado con la cándida luz de las velas… todo finamente arreglado para una cena romántica, pase la punta de mi dedo por el ribete del plato… una suave melodía comenzó a sonar en el aire… me sobre salte, cuando unas grandes manos me tomaron la cintura.

-Bienvenida a casa mi Bella… quiero que esta noche sea especial– me volví para encararlo mientras me soltaba de su agarre.

-¿Qué significa esto Jake?...

-Es una cena para ti… o más bien para nosotros…- una gran sonrisa se dibujó en su rostro, mientras trató de acercarse a mi nuevamente, pero retrocedí – Bella no te pongas difícil… sé que estas enojada pero dame una oportunidad, para enmendar mis errores.

-Jake, en estos meses te he dado más de una oportunidad… -  le dije caminando hacia la puerta para ir a mi habitación – ya no me vas a convencer con un ramo de flores y cenas románticas – aparto la silla que tenía más próxima y me miro

-Mañana me voy a Tokio… Cullen me envío para reunir todos los antecedentes de un caso importante – levanto los hombros abatido – quería que conversáramos antes que me fuera

-Jake, no sé qué decirte… ¿tú crees que es seguro que viajes tan lejos?, últimamente has estado muy inestable…

-Tengo que hacerlo Bella, es mi trabajo… además no le voy a dar en la satisfacción  al imbécil de Cullen de verme fracasar – comento con voz filosa -

-No te tomes la cosa tan personal Jacob, apenas conoces a Edward. Por favor… cuídate y me llamas cuando llegues a Tokio, quiero saber que llegaste bien –  salí del comedor hacia mi dormitorio

-¡ESO ES TODO LO QUE ME VAS A DECIR BELLA!... ¡QUE TE LLAME CUANDO LLEGUE!... – corrí por el pasillo a mi dormitorio y me encerré. No tenía ganas de enfrentarlo…  ni tampoco tenía la fortaleza para tratar de contenerlo. Los golpes en la puerta me sobresaltaron y me aleje de ella.

-BELLA, POR FAVOR…. Necesito hablar contigo…. te extraño… Bells, necesito a mi amiga… Sé que he sido un desgraciado… pero te necesito – Su voz quebrada y el abatimiento que trasmitía demostraba que de  verdad estaba afectado. Jacob es un hombre fuerte no siempre deja salir sus sentimientos de esta forma, algo grave lo debe estar afectando - Abrí la puerta lentamente, vacilante…  ahí estaba llorando apoyado en la pared del pasillo… me abrazo fuerte y sus gruesas lágrimas  mojaron levemente mi pelo…

-Tranquilo Jake… - le susurre – ya va a pasar, lo que sea que te está afectando tanto… necesitas estar más tranquilo – Le tome la mano y lo conduje a mi cama, se sentó en la orilla, mientras le acariciaba la mano.

-Bells… perdón… perdóname por todo… tú no tienes la culpa de lo desgraciado que soy - Suspire, mirando el suelo.

-Jake, ¿Qué te pasa?... ¿qué te atormenta?... sé que estas siendo irresponsable en no tomarte los medicamentos, en saltarte las horas con tú psiquiatra… pero siento que es algo más. ¿Qué tengo que esperar de todo esto? – se echó para atrás en la cama con sus brazos sobre su rostro.

-Esto es tan difícil, Bells ¡Está mierda de vida, es tan complicada!... Todo era tan simple cuando éramos niños… ¿por qué no puede ser más simple ahora?... – Las lágrimas seguían cayendo por la comisura de sus ojos – después de esa jodida fiesta todo se volvió tan confuso, tan nebuloso… es como volver atrás… - medite sus palabras, sopesando que efectivamente lo que desestabiliza a Jake son los celos, los celos por Edward, pero su reflexión es más profunda, como si sus fantasmas se posaran sobre sus hombros.

-Así es la vida, Jake… - Imite su postura dejándome caer en la cama de espaldas – Todo cambia, nuestras decisiones afectan nuestra existencia, ellas hacen que seamos felices o miserables, pero al final es nuestra culpa… lo bueno o lo malo - nos quedamos en silencio por unos varios minutos, minutos o tal vez horas. No eres el único triste, hay momentos en que me siento tan sola Jake… ahora me siento vacía, cómo si gritara en medio de la quinta avenida y nadie si quiera se inmutara - levanto la cabeza,  y me miró con los ojos como platos,  un sollozo salió de mi garganta

-Bella, tú sabes que siempre he estado contigo, desde que nos casamos nunca te he dejado sola… tu sabes que te quiero… que eres importante para mí, siempre lo has sido.

-Es mucho más que esto… es mucho más profundo que este acuerdo… - le dije mirando el techo de mi  habitación - nos falta tanto Jake, tanto para ser realmente felices… - las traicioneras lágrimas se escaparon de mis ojos

-¿Pero me quieres? –note el tono de angustia en su voz – nosotros siempre nos hemos querido, desde que éramos niños, tenemos que inténtalo, somos un matrimonio.

-Te quiero y mucho Jake, pero nosotros no servimos para esto, un matrimonio es amor, confianza, pasión, seguridad, sentimientos, cosas que  nosotros no tenemos… - gire la cabeza para mirarlo y las lágrimas corrían copiosamente por mis mejillas – no tenemos intimidad, no tenemos metas, somos dos extraños.

-Bella, eso lo podemos mejorar. Yo se lo jure a Charlie… Po..podemos arreglar lo que está mal - su voz se volvía más angustiosa - podemos comenzar como un noviazgo, algo así, esta en nosotros darnos la oportunidad mi Bella, sin presiones.

-No Jake – dije en un susurro – Tú no me amas, yo no te amo… nos queremos, esto no es como cuando teníamos catorce años, y nos besábamos escondidos, Ya soy una mujer, con sueños, quiero más Jake. 

-Yo te puedo dar más preciosa, ayudarte a conseguir tus sueños. Se lo prometí a tu papá- se acercó a mí y me llevo a su pecho, acariciando mi pelo.

-Le prometimos tantas cosas a Charlie - le dije contra su pecho - le prometimos que seriamos felices, que cuidaríamos la empresa, que tendríamos hijos - un fuerte sollozo se ahogó en mi garganta -  y yo no soy  feliz Jacob, no puedo cumplir las promesas que le hice a mi papá porque simplemente quiero más que esto – Jake se tensó y levantándose bruscamente de la cama, y comenzó a pasear de un lado para el otro en mi habitación. Yo abrace mis rodillas mientas las lágrimas corrían por mis mejillas.

-¡¿diplomáticamente estas terminando conmigo?!... – Sus ojos negros estaban clavados en mí – ¡con tus lindas palabras me estas mandando a la mierda! ¡estas terminando nuestro matrimonio!

-No podemos terminar algo que nunca existió Jacob, Eres mi amigo, mi mejor amigo, nunca debimos hacer esto… nos está destruyendo.

-¡ESO ES MENTIRA BELLA!... ¡TÚ TIENES A ALGUIEN MAS!...  ¡NO ME MIENTAS!... ¡ERES IGU…IGUAL…QUE TODAS… ME VAS A DEJAR… IGUAL QUE ELLA!

Se acercó tomándome de los brazos, para besarme con tanta fuerza que sentí la sangre de mis labios heridos al chocar con mis dientes. Le tire el pelo y lo golpee en la cara mientras él seguía refregándose en mi boca, agarro mi pelo y lo tiro con tanta fuerza que solté un grito, logrando que él adentrara su lengua en mi boca. El asco, junto con el pánico hicieron que las arcadas se hicieran presentes, sentí la bilis subir por mi garganta, eso hizo que Jacob se separara de mí, el vómito se desparramo sobre mi cama… los temblores eran incontrolables… Jacob me miraba horrorizado con la misma expresión que ponía después de sus arranques de furia, como si él, no provocara estas cosas.

Al tratar de pararme de la cama, me caí y todo el peso de mi cuerpo, recayó en mi mano derecha, desesperada por arrancar me levante ignorando el dolor de mi muñeca, necesitaba salir de ahí, el estremecimiento en mi pecho me indicaba que esto no terminaría aquí. Me acerque a la puerta para huir pero los brazos de Jacob me tomaron con ímpetu lanzándome a la cama, sobre el vómito… el peso de su cuerpo, no me permitía moverme y comenzaba a faltarme el aire. 

-No Isabella Swan…. ¡esto se va a acabar cuando YO lo diga!...  – Sus manos bajaron por mis costados hasta llegar a mis piernas, las que apretó con fuerza, su cabeza se perdió en mi cuello, sus dientes se clavaron en mi piel mientras me mordía, grite presa de la rabia, del dolor… Estaba sola, mas sola que nunca… más triste y desolada de lo que he estado en mi vida… cuando el peso de la convicción me llego de golpe, deje de luchar y retorcerme… - ¡Quieres ser mujer! ahora lo serás… - desgarro mi blusa de un tirón dejando expuesto mi sostén - ¿sabes por qué?... porque eres mi esposa. - reaccione a sus palabras y presa del odio y el dolor,  lo mire con toda la rabia y repugnancia que sentía dentro de mí, escupí en su cara – ¿sabes porque te voy a tomar ahora?... ¡porqué me aburrí de ver putas!… ¿Quieres hijos?... ¿sabes cómo se hacen los hijos?… - Sus manos me apretaron fuerte en las costillas, sentí tanto miedo, y dolor que mi cuerpo se desconectó de mi mente, sentí la bruma cubrirme lentamente, mi último acto voluntario fue girar mi cabeza hacia la foto que estaba sobre mi velador. – ¡Papá!… - me lleno la oscuridad…

-¡Pero mírala Jasper!, esta… No la podemos dejar sola… ¡Ella no reacciona! – Escuche los sollozos, lejanos… tan lejanos entre la espesa  bruma que me envolvía…

…mi madre cepillando mi cabello lentamente, tan relajante… el tibio sol de Forks… el aroma a la madera del aserradero… los ojitos de Kely mi cachorra labradora…  tomando chocolate caliente en el porche… de nuevo los sollozos y las caricias suaves en mi cabello…

-¡¿Maldito Jacob?!... ¿dónde está ahora el maldito chucho?

… mi padre en el hospital… mi reflejo en el espejo vestida con un traje blanco… mi madre leyendo sentada en su sillón favorito… apretando la azulada y fría mano de Charlie mientras luchaba por respirar… Kely… toques suaves… susurros.

-Encerrado en su habitación, más calmado…

-Tenemos que llevarnos a Bella,  a casa…. no... l..la puedo dejar a… acá…

Sentí que era levantada lentamente. Un suave perfume de hombre se arremolino en mi nariz… me sentí segura en esos brazos… me aferre a ellos buscando refugio y consuelo…

-Necesitamos llevarla al Hospital Alice, deben examinarla. Además de verificar que su muñeca no este fracturada.

-Vamos, quiero sacarla de acá… mientras este en esta casa, no va a reaccionar.

-¿Qué hacemos con Jacob? ¿Crees que se opondrá?

-No me interesa Jazz… jamás volverá a tocarle ni un pelo a mi amiga.

Sigilosamente entre por la puerta trasera de nuestra casa… siempre me ha gustado jugar a  asustar a mi mamá… camine lentamente por el pasillo y desde la orilla de la escalera la vi… sentada en su sillón favorito… tenía sus ojos rojos y en sus manos un papel. Me tense cuando me di cuenta que estaba llorando… no era normal en ella, nunca lloraba… siempre sonreía… me quede paralizada junto a las escaleras mirando detalladamente todos los movimientos de mi mamá, el peso que se acumuló en mi estómago no permitió que me moviera… no sé cuánto tiempo paso… minutos tal vez horas… no estoy segura… hasta que ella doblo el papel que tenía en sus manos y lo dejo sobre la mesa junto a su alianza… lentamente se levantó y tomo una maleta, la cual no había visto antes… camino hasta la puerta principal… ¡se va!... era lo que me repetía en mi mente, sin poder moverme… ¡ella se iba!.... cuando reaccione la puerta se cerró…. En ese momento mis piernas volvieron a la vida y camine rápidamente hasta tomar el pomo de la cerradura… abrí de un tirón la puerta y corrí hacía el antejardín… me tropecé con el escalón del porche y caí de bruces al suelo…. Me apoyé en las rodillas para poder mirarla….desesperada…con el pecho oprimido… ¡NO ME DEJES!... ¡NO ME DEJES!...

-¡Bella!... cariño, despierta por favor, te lo ruego… tienes que reaccionar… – una suave y angustiada voz me llamaba… lentamente mi mente dejaba esa densa neblina… mis ojos comenzaban a enfocar con más claridad… solo podía distinguir paredes blancas… gire mi cabeza y un ventanal… con una pequeña terraza. ¿Dónde estoy?... mi boca estaba seca y amarga. Cambie mi posición y sentí un peso en mi mano la cual trate de levantar pero pesaba tanto y yo estaba tan lánguida…  mire hacía el otro lado de la habitación, descubriendo unos expectantes ojos verdes que me miraban, me perdí en ellos mientras veía como cada vez se volvían más cristalinos y acuosos…

-¡Oh!, amiga… me has asustado tanto… - Las lágrimas cayeron de sus ojos y seguí el recorrido que hizo hasta perderse…

-¿Por qué lloras? – Logre decir en un susurro casi inaudible. Levante pesadamente mi mano izquierda con la intensión de secar las lágrimas de ese rostro tan bonito… no debería estar llorando… -¿Por qué lloras? – volví a repetir un poco más alto

-No te preocupes por mí, Bella… Yo estoy bien. Llamaré al médico para que sepa que despertaste.

-¿Médico?… ¿Alice?... ¿Por qué estoy en un hospital?

-¡Oh Bella!... – sollozo mientras me acariciaba el pelo – sé que estas un poco confundida… con Jasper te trajimos en la madrugada de ayer, d..des… después de que él me llamara…

El peso de la realidad cayó sobre mí de golpe. Flashes de Jacob mordiendo mí cuello, tocando… besándome, rompiendo mí ropa. Inevitablemente mi estómago se contrajo por las náuseas. Alice viendo mi reacción me acerco un recipiente donde volqué todo lo inexistente de mi estómago sin contemplaciones. Cuando los espasmos se calmaron, volví a enfocarme en Alice, su rostro estaba marcado por la preocupación y el dolor.

-Alice, ¿Qué me hizo? – pregunte en un susurro y no pude evitar el desgarrador sollozo que salió de mi interior y las lágrimas, cerré los ojos tratando en vano de detenerlas – Dímelo Alice…

-Factura de tu muñeca derecha, múltiples con… -La puerta se abrió y haciendo que Alice se callara. Desvié mi mirada hacía el hombre que entro en la habitación.

-Veo que se ha despertado Srta. Swan. ¿Cómo se siente?

-Aturdida… creo

-Son los analgésicos que le hemos administrado… es normal.  Por cierto soy el Dr. Ammun.

-Dr. Ammun ¿Cuándo podre irme?

-¿Por qué la prisa? Debes preocuparte por tu salud Isabella. Además todavía estas en observación. Y nos queda lo más importante para preservar completamente tu salud.

-¿Importante? –Lo mire detenidamente- ¿Qué es tan importante?... ¿e..ee..esmuygrave?... ¿mmm…meda..daño…mucho?- mi corazón comenzó a acelerarse ¿Qué le pasará a Jake? – mire aterrorizada a Alice y después al doctor, quién extrañado fijo sus ojos en mí y su mirada paso desde el desconcierto a la frustración

-Isabella, ¿estas siendo condescendiente con tu agresor? – Replicó con evidente enfado a pesar que trato de disimularlo- Lo más importante Isabella, es que denuncies a tu atacante, de otra forma nunca estarás completamente sana, y te volverás una cliente frecuente de nuestra clínica… lo cual espero no ocurra.

-Es que… Jacob no está bien… y usted no entiende…

-Isabella, eso es evidente… pero déjame decirte que tuviste suerte… tus contusiones son múltiples, nada grave, salvo la fractura en tu mano. Pero las señales en tu cuerpo evidencian un intento de agresión sexual. Es un caso que se debe denunciar.

-¿Intento?... ¿no hubo… vi…violación?  - Pregunte no muy segura de querer saber la verdad.

-No, hemos hecho los exámenes físicos. Los que dejan en claro que no fuiste violentada sexualmente con penetración. Pero es inquietante Isabella, pudo ser mucho peor, podrías haber muerto.  Lamentablemente por ser un caso de violencia la ley nos obliga a pasar los antecedentes a la policía.

-No puedo… él es mi… esposo – Mire a Alice implorándole ayuda.

-¿Tú esposo?... – pregunto el Dr. Ammun – ¿esta era tu noche de bodas? –  Alice y yo lo miramos confundidas…. El aguardo mi respuesta

-No – respondí escuetamente

-No entiendo Isabella. Te hemos revisado ginecológicamente… Tú aún eres virgen…  - Alice me miro con sorpresa, mientras el doctor negaba con la cabeza saliendo de la habitación. Alice, se acercó  a mi lado, me beso en la mejilla y salió detrás del médico.

Las palabras del médico resonaban en mi cabeza, la cual estaba llena de preguntas. No recordaba claramente todo lo que había pasado, había tenido la certeza que no me iba a escapar de las garras de Jacob…  ¿Qué lo hizo detenerse?... ¿llegaría alguien a ayudarme?... pero ¿cómo alguien acudiría a mi rescate? Entonces recordé las palabras de Alice –“él me llamo”- no lograba entender.

¿Qué es lo que tengo que hacer?... ¿denunciarlo?... eso acabaría con su carrera, la cual es su vida… ¿pero y mi vida?

Perdí la noción del tiempo… como debía enfrentarme al futuro… tratando de recordar la conversación que habíamos tenido con Jake antes de ataque… ¿Qué lo perturba?...

-¿Bella? – Volví la cabeza hacia la puerta para ver asomarse a Rosalie

-Rose… -las lágrimas cayeron nuevamente, Rosalie paso y ocupo la silla donde Alice estuvo sentada hace un rato.

-Amiga, ¿te sientes bien?... o mejor dicho ¿mejor? – acarició mi pelo tal como lo había hecho su cuñada, con tanta ternura

-Me siento mejor Rose… se está pasando el aturdimiento. ¿Alice, te aviso? – su dulce mirada recorrió mi rostro

-Jasper y Alice me avisaron hoy en la mañana… estaban tan preocupados porque no reaccionabas. ¿Estás segura que estas bien?

-Si amiga… el doctor vino hace un rato y dijo que lo más grave era la fractura de mi muñeca – Trate de levantarla nuevamente pero no tenía fuerzas y el yeso parecía tener plomo

-Estoy hablando de cómo te sientes emocionalmente Bella… - En ese instante entro Alice y sonrió al ver a Rose

-Hola Rose que bueno que viniste…  se acercó a mi cama y se sentó en la orilla, me miró y después a Rose. Me quede mirándola y su mentón temblaba y apretaba sus labios tratando de no llorar. Rose se puso de pie y la abrazo mientras sus sollozos eran cada vez más audibles.

-Tranquila Alice… Bella ya está bien.

-Alice, no llores… Rose  tiene razón ya estoy bien… pronto saldré del hospital.

-Bella, es que no te imaginas la angustia que tengo… por todo lo que has vivido estos seis meses  – Rose soltó el abrazo y se volvió a mirarme, yo baje la vista para juguetear con la sabana

-¿está fue la primera vez?... Bella, ¿es así?

-El… es la primera vez que trata de abusar de mí… pero ha sido…

-¿Abusar Bella?... – pregunto Rosalie, furiosa – eres su esposa, como Jacob pretendía abusar de ti… ¿le dijiste que no querías esta noche por eso se enojó y te dejo así? – Alice se bajó de la cama acercándose más a  mí, le indico a Rosalie que se sentara, quien con el ceño fruncido nos miró - ¿qué me estoy perdiendo?

-Rose… mi… - respire profundo – mi matrimonio con Jacob es una farsa… - su jadeo me hizo mirarla – sí, estos seis meses han sido una negra mentira... nunca he amado a Jacob, ni él me ha amado a mí… me case con él por una promesa, por complacer a mi padre.

-Pero Bella, ¿Cómo accediste a esto?...

-Rose, mi padre murió hace 4 meses… yo no podía decirle que no… - las estúpidas lágrimas salieron a escena nuevamente -  no pude decirle que no…

-Bella, esto es horrible… - se puso de pie y comenzó a caminar por la habitación – te has visto obligada de ser la esposa de ese mal nacido…

-Rose, cálmate – dijo Alice – si es terrible lo que ha pasado… pero lo importante ahora – Se dio vuelta y me miro directamente – No volverás a estar con él Bella… te vendrás a vivir con nosotros.

-Alice, gracias por tu ofrecimiento, pero no puedo aceptarlo. No quiero molestarte.

-No Bella, no me obligues a pasar por lo mismo nuevamente – sus ojos se llenaron de lágrimas – Cua...cuándo él llamo y dijo que estabas… que no reaccionabas… que te había herido… pensé lo peor, y cuando te vi – las lágrimas caían por sus blancas mejillas -  sobre la cama, con tu ropa desgarrada… así indefensa, frágil…

-Alice… por favor no sigas

-Entonces quédate con nosotros… por favor Bella.

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Muchas gracias por sus comentarios, alertas y favoritos…

Me hacen muy feliz =)