Capítulo 6 - Tu Abrazo Protector
BPOV
Mi cuerpo se siente tan extraño, lleno de una electricidad alarmante. Sólo soy consciente que camino y de la caliente mano que me empuja lentamente hacia la salida. Ese calor es tan diferente a lo que me hizo sentir Edward… al recordar las sensaciones, su manera posesiva de tomarme y estrecharme… su aroma…
-Bella… ¡Bella! - Escuche un lejano llamado, fruncí el ceño sin entender todavía sumergida en mis pensamientos. – ¡ISABELLA!... – Reaccione al grito y me di cuenta que estaba en el coche, Jacob me miraba de lado mientras manejaba rápidamente… - ¡Hasta que reaccionas! – Sus ojos eran flameantes llamas y sus manos apretaban fuertemente el volante.
-Perdón Jacob, estaba distraída - Volví a mirar por la ventana y las luces de la ciudad se contorneaban junto a la calle, por la velocidad que manejaba Jacob - ¿Por qué vamos tan rápido?
-Bella, Bella… - Negó con la cabeza enfurecido. - quiero llegar a casa, antes que explote de rabia… - dijo sin mirarme, acelerando un poco más- ¡Esta es unas de las peores noches de mi vida! – me sobresalte cuando golpeó el volante. Le toque el brazo para que se calmara.
-Jacob, tranquilo… no te alteres más… recuerda respira, concéntrate en respirar – llena de angustia contenida, los ataques de ira de Jacob nunca son buenos
- ¡La respiración a la mierda! Me vas a tener que explicar todo Isabella, ¡todo! – Me miro de lado con la mandíbula apretada.
-¿Qué se supone que debo explicarte? – le pregunte mientras entraba en el estacionamiento del edificio. La situación ya comenzaba a molestarme. Es que de nuevo vamos a comenzar con la misma discusión, cada vez que Jacob pasaba los niveles establecidos por cómo me visto, por cómo converso, lo que hago cuando salgo… Ya me esta sobre pasando
Apenas estaciono, abrí la puerta del coche y salí en dirección al ascensor. Me tomo del brazo con demasiada fuerza y tiro de mí.
-¡No vas a arrancarte Isabella, vas a tener que responder! – me grito en la cara cuando su agarre se hizo más fuerte
-¡Suéltame! Jacob, me estas lastimando. ¡¿Puedes controlarte?!... ¡y me sueltas!… - le dije desafiante e irritada… me librero de su agarre y me encamine al ascensor.
Dentro del ascensor, Jacob estaba hecho una furia, me miraba de reojo y su mandíbula tensa. Cuando llegamos a nuestro piso, abrí la puerta y entre hacia la sala, me saque los tacones que me estaban matando los pies, los tome y me dirigí directamente a mi dormitorio sin siquiera mirar a Jacob.
Cerré la puerta de mi habitación con seguro, me deslice por ella hasta llegar al suelo, mis ojos se llenaron de lágrimas… Con mi cabeza entre las rodillas, controle la respiración. No debó mostrarme débil… él tiene que aprender a controlarse… si muestro miedo él se aprovechara… deja que Jacob se calme… me repetía como un mantra es la misma situación cuando se enfurece, recuerda lo que has aprendido, como debes contener la situación. Me levante del suelo, comencé a sacarme las horquillas del pelo, y fui al baño para quitar el maquillaje, tome mi pijama y me cambié. Estaba dispuesta a acostarme cuando el estruendo de vidrios y los gritos de Jacob, me sobresaltaron. Me levante rápidamente y del cajón de mi ropa interior saque el gas pimienta y lo metí en el bolsillo de mi pantalón de pijama… tranquila Bella… jamás te ha hecho daño… no muestres miedo… abrí la puerta y camine por el pasillo. Jacob estaba de pie frente a la isla de la cocina. Las manos apoyadas en la orilla… Levanto su cabeza y me miro… su expresión era tan atormentada, sus ojos llenos de dolor y rabia.
-Necesito un trago – me miro durante el tiempo que me quede congelada en la entrada, sabía que no tenía que entrar en la cocina… demasiadas cosas que pueden ser armas - ¡mierda!.. Necesito tomar algo… dime dónde está el alcohol, necesito algo fuerte... – se tironeo el pelo con ambas manos
-No hay Jacob – respiré lentamente para controlarme – En esta casa no hay alcohol, tú lo sabes.
-Maldita sea Isabella…. Necesito un trago… no entiendes - tomo una jarra de vidrio que había en la mesa y la tiro - Apretó el puño y se dirigió a mí. Me quede parada, enfrentándolo…
-¡Si quieres un trago, sal a buscarlo y deja de hacer escándalos en mi casa!… son casi las dos de la madrugada. Si sigues con tus berrinches los vecinos llamaran a la policía. – Le hable firme con los dientes apretados – Si necesitas desahogar tu testosterona hazlo, pero lejos de mi casa. Me gire en dirección a mi dormitorio nuevamente tratando de controlar mis temblores.
-¡Eres mi esposa!... no te vas a ningún lado Isabella…. – Camino para alcanzarme, me tomo del brazo y me atrapo entre la pared
-¡Suéltame Jacob!... – él sonrió - Soy tu esposa en el papel Jacob, pero tú sabes muy bien que este matrimonio no es real… - no me dejo continuar sus labios se apoderaron de los míos, tan violentamente que por primera vez en toda la noche sentí miedo de verdad
-Pues vas a hacerlo ahora…ya me aburrí de tu jueguito virginal… Isabella – Abrí los ojos con temor y el me miró satisfecho… sentí que se apretaba más fuerte en mí – serás mi esposa… mi mujer… ¿o prefieres que sea otro? – Una de sus manos tomo mis muñecas y con la otra apretó mi cintura, mientras su boca bajaba por mi cuello, podía sentir su erección chocando con mí pierna
-Te vas a arrepentir mañana Jacob… ¡si me tocas un pelo te vas a arrepentir!... – le grite – estas pasando el límite, lo sabes… ¡suéltame Jacob!... – él pareció dudar y me soltó – Se dejó caer en el suelo apoyado en la pared… y comenzó a llorar.
-¿Te gusta Edward Cullen?... – me sorprendí por la pregunta – respóndeme Bella… ¿te gusta? – Levanto su cabeza y me miro – ¿esa es la clase de hombre que quieres?...
-No, Jacob… no me gusta Edward Cullen – susurre – ¿ahora me puedes explicar que mierda te pasa?, ¿Por qué me preguntas si me gusta ese tipo? - Reflexione en la pregunta que me hizo Jacob - no sé qué le paso a él esta noche… cuando lo conocí en la casa de Esme hace unas semanas él fue indiferente y petulante, por no decir grosero… no sé porque se comportó de esta forma en la cena.
-¿Estas segura?... – Lo mire sin entender, estaba evidentemente más tranquilo.
-Basta Jacob, no tengo ánimos en este momento… - Levante los brazos sobre mi cabeza, tratando de entender el cambio de ánimo de Jacob - ¿tomaste tus medicamentos Jacob?
-No, no los he tomado desde hace una semana…
-¡Maldición Jacob!, ¿te das cuenta lo que significa?... ¿te has dado cuenta lo que estabas a punto de hacer?... ¿Por qué te estas comportando así?... me prometiste la semana pasada que ibas a controlarte, que nunca más pasaría.
-Perdóname Bella… perdóname – Se levantó con la intención de abrazarme… me aleje de él y sus brazos cayeron a los lados de su cuerpo – Es por el trabajo… no puedo estar siempre medicado… necesito concentrarme en lo que hago... por eso no los he tomado… perdóname Bella
-No, Jacob, no te voy a perdonar… el otro día fue por la cena que tuve en la casa de Alice… Ahora por qué no sé qué… ¡Dios!... Espero te calmes y mañana vamos a hablar de esto – le dije con cansancio – Tomate los medicamentos y a primera hora te voy a pedir hora con el Dr. Kendel.
-No quiero Bella… no quiero volver al psiquiatra… no tengo tiempo con todos los casos que tengo en la empresa…
-¿Ese maldito trabajo es más importante que tú salud?... ¿de qué te va a servir Jacob si terminas golpeándome?... Si al no vas al médico Jacob esto se acaba… Ya no soporto esta situación, cada vez olvidas que no somos más que amigos y que esto es un acuerdo que tú hiciste con mi padre…
-Bella – su voz se quebró – Se lo jure a Charlie… que te cuidaría con mi vida, que te haría feliz, que sería tú brazo protector…
-¿Te escuchaste Jacob?... ¿me estas cuidando? – camine por el pasillo y me encerré nuevamente en mi habitación…
Acostada en la cama, sin poder conciliar el sueño. ¿Cuándo todo se volvió tan complicado? No es la primera vez que Jacob se descontrola, pero esta vez sí he sentido mucho miedo, casi pánico de lo que hubiera sido capaz de hacer… ¡Papá cuanto te extraño! Ahogue mi grito de dolor con la almohada ¿era esto lo que querías cuando le propusiste a Jacob que se casara conmigo? ¡Dios! ¿Cómo voy a soportar todo esto? Convivir con una persona con problemas psiquiátricos es complejo, lo quiero… ¿será eso suficiente? el último intento de Charlie para protegerme.
Me levante cuando los primeros rayos del sol se colaron por mi ventana, me metí a la ducha. Tendría que enfrentarme a esto, tenía que tomar una decisión con respecto a lo que quería del futuro. Mientras el agua tibia relajaba mis músculos antes de ir donde mi editora y a almorzar con Alice. No tenía intenciones de hablar con Jacob, así que tome mi bolso y salí del departamento, en busca de un Starbucks necesitaba un café con urgencia.
Después de una hora y medía sentada en el café, me dirigí a la oficina de mi editora, le había enviado el borrador de una nueva historia para que la evaluara y me diera su apreciación.
Entre en la oficina donde la secretaría de Emily me esperaba.
-Bella, que alegría verte. Toma asiento Emily viene enseguida.
-Gracias Maggie, ¿Cómo estás tú? – Ella sonrió
-Feliz, hace una semana me pidieron matrimonio, así aun ando en las nubes. – Suspiro fuertemente – Aunque no te imaginas lo emocionada que estoy porque tengo miles de ideas para hacer… hay tantas cosas… - Reflexiono distraída como si hablara con ella misma, se volvió a mirarme - Claro que estas invitada… - Irradiaba felicidad - ¿Cómo fue tu boda Bella? – Pregunto y un nudo se formó en mi estómago por la tristeza y la decepción, cuando le iba a contestar llego Emily. La que me miro y entrecerró los ojos, me tomo de la mano sin decir nada y me llevo a su oficina.
La oficina de Emily, era fantástica, llena de objetos místicos, revestida en madera, con cuadros de profundos bosques. Sobre la mesa lateral, descansan retratos de su esposo Sam y sus hijos.
-¿Cómo estas Bella? – Me miro especulativa mientras tomaba asiento en su escritorio
-Bien – conteste escuetamente sin mirarla a los ojos
-No te creo, ¿tienes problemas? – Junto sus manos sobre el escritorio esperando mi respuesta.
-Emily… por favor, no estoy de ánimo… - mire mis manos las que se volvieron demasiado interesantes en este momento.
-Bella Swan, si no quieres contar está bien. Pero sabes que acá estaré, cada vez que lo necesites.
-Gracias Emily. ¿Qué te pareció la historia? – le pregunte desesperada por cambiar el tema hacia lugares más seguros.
-Fantástica, creo que tenemos algunos ajustes en cuanto al tiempo de los personajes, y la profundidad del perfil del antagonista. Pero en cuanto a la historia en concreto es la muy buena.
-Qué bueno que te gusto… Sé que es un desafío importante, distinto a lo que he escrito antes. ¿Qué dices del nombre?
-Me encanto el nombre “Sueño de Rocío”, es un nombre perfecto para la trama de la historia. Eres talentosa… no lo dudes.
…
Las dos horas que tenía disponibles antes de juntarme con Alice las pasé en el Central Park, necesitaba ordenar mis ideas, mis cosas. Camine lentamente disfrutando del viento en mi cara, y el suave arrullo de los rayos del sol, cerré los ojos tendida en el pasto.
Hay momentos en la visa que sientes que el mundo es demasiado grande, ¿Cómo reaccionas? ¿Cómo soportas abrir los ojos nuevamente?... mi única manera es volver mi corazón a lo más importante… mi padre, mi amado padre, sus grandes y brillantes ojos, las arrugas que se formaban cuando sonreía…
-Bells, necesito conversar contigo, puedes sentarte a mi lado.-Me acerque a la camilla y tome su mano azulada cada vez más delgada
-Dime papá, soy toda oídos – sonrío y la sonda de oxigeno que tiene conectada se movió en su rostro – Hija, tu sabes que eres todo para mí, soy tú única familia… no me gustaría que te quedaras así, sin nadie a quien recurrir y que te proteja… Bells… puedes entender que te amo hija…
-Cha… Papá, no hables así… tú sabes que estarás y que no estoy sola… Jake siempre está con nosotros
-Hija… - me apretó la mano y me miro directamente a los ojos – yo… tú… no voy a sobrevivir hija… tengo semanas… - Mis ojos se llenaron irremediablemente de lágrimas, las que corrieron por mis mejillas – Por eso yo hable con Jake, y le pedí que me jurara que él te cuidaría con su propia vida de ser posible... por lo cual le he propuesto algo que él acepto
-No digas eso papá… yo… sé que te recuperaras… te lo ruego no pienses así, no es necesario que hagas que Jake, se sienta comprometido en estar siempre… Yo puedo hacerlo.
-Mi pequeña Bells, eres una mujer frágil, no digo que no tengas carácter pero siempre vas a necesitar alguien que te proteja… cuando yo no esté… Le pedí a Jake que se case contigo, y quiero que tu aceptes – esbozo un sonrisa entre sus jadeos por el esfuerzo de hablar – me harías muy feliz, el saber que aceptas. – Explore sus ojos para ver si mentía o era una broma… - ¿aceptas?...
Entre al restaurant donde quede de juntarme con Alice, la vi desde la puerta y el maître me consulto por la reserva, cuando le indique el apellido de mi amiga, me llevo a la mesa donde ella ya estaba degustando un vino, me senté frente a ella.
-¡Bella!, amiga te estaba esperando, me alegra verte hoy…. Anoche tuve un sueño muy extraño donde tú estabas tan… tan alterada… y después estabas desmayada sobre una cama, había vidrios y llantos… me desperté tan desesperada… ¿Cómo estás?- No pude controlar la expresión de sorpresa, primero por la rapidez con la que hablo, y por otro lado porque sus sueños siempre han sido predictivos…. Ella lo sabe por eso me ametrallo con su visión
-Alice… no te puedo mentir… no estoy muy bien – sus ojos verdes tan profundos se conectaron con los míos, odiaba cuando hacia eso tratando de ver más allá…
-Lo sé Bella. Puedo verlo, conversaremos y podrás tomar tú decisión. Ahora almorzaremos y te relajaras, ya pedí por ti, sé que te gustan las pastas y acá son exquisitas.
-Gracias amiga, necesito que me ayudes. - dude - Anoche Jacob se puso violento nuevamente, fue peor que las otras veces estaba de verdad aterrorizada
-¿Fue por lo de la cena?...
-No lo sé… quizás -Levante lo hombros - él me pregunto si me gustaba Edward, puedes creerlo. Pero la verdad creo que algo más le paso, estábamos bien hasta que llego Edward con su novia.
-Mmm… ¿Por qué sigues aguantando esto Bella?... – suspire y revolví mis ravioles con el tenedor
-No lo sé… estoy confundida, le hice una promesa a Charlie, tú lo sabes.
-Pero Charlie quería que estuvieras segura… y yo no puedo asegurar siquiera que seas feliz ahora… ¿lo quieres?
-Sí, lo quiero Alice, él siempre ha estado conmigo… siempre… cuando esta con su tratamiento él está tranquilo, es amoroso, se preocupa por mi, me trata como su novia.
-No puedes pasarte la vida perdonando, hace unas semanas también perdió los estribos y porque tú lo sabes controlar no te ha dañado, pero si llega el día que no puedas controlarlo ¿Qué vas hacer? él sabe que a la larga igual lo perdonarías… - Alice, me apretó la mano que tenía sobre la mesa.
-Lo amenace que si no sigue el tratamiento al pie de la letra… lo dejaré.
-Sabes que estas corriendo un gran riesgo, Bella…
-No es tan fácil Alice. Él siempre ha estado ahí, estamos los dos solos… Jacob no siempre fue así, este cuadro comenzó en su último año de la universidad, fue algo que lo perturbo, que gatillo esto.
-¿Él no te lo ha contado que le paso?
-Lo que sé es que tuvo un problema con su novia de ese entonces… después de eso tuvo un ataque de ira, donde rompió todo en su departamento, llego la policía y al ver que el problema era médico lo derivaron al especialista. Yo lo fui a visitar a la clínica, al final logro terminar el semestre, después de eso se quedó con nosotros haciéndose cargo del área legal de la empresa de mí padre. Charlie le dio todos los poderes para hacerse cargo de la empresa, la condición es estar casado conmigo. – Alice estaba meditando, mientras el garzón nos traía nuestros cafés
-Bella, también quería conversar contigo de algo que me inquieta.
-Dime Alice, ¿Qué sucede?…
-Es Edward, me preocupa su comportamiento de ayer – Su ceño se frunció – Lo que me preocupa en realidad eres tú.
-¿Yo?... ¿Qué tengo que ver yo con Edward? Apenas he cruzado una docena de palabras con él
-Es mi hermano pero se ha convertido en un completo extraño – Sus ojos se llenaron de lágrimas y me miro – Después que tú te fuiste, quise pedirle una explicación de su comportamiento contigo – la mire extrañada
-¿Qué estuvo mal? Fue extraño, pero él es así, Alice yo no lo conozco tanto, pero no es nada grave, solo bailo conmigo.
-Bella, él no es así, trata a las mujeres como objetos, contigo fue como si lo deslumbraras, fue extraño… en todo sentido Bella, yo lo estaba mirando y él te tomaba como si fueras un cristal, y su expresión era de posesión.
-¿Pero qué te dijo cuándo lo enfrentaste? – Alice comenzó ha subir las mangas de su blusa y dejo a la vista unos cardenales que formaban el contorno de dedos.
-¡¿Él te hizo eso?!...- ella asintió y una lágrima cajo por sus mejillas - ¡oh! Alice, no lo puedo creer… ¿y Jasper que hizo?
-Jasper lo golpeo de vuelta, él ni siquiera se defendió. Pero no es eso lo que más me preocupa Bella. Lo que realmente me preocupa es que él te quiere a ti – La mire sin entender que quería decir con eso… ¿Qué quiere Edward Cullen de mí?...
-¿Q...Qué estás diciendo?
-Lo que escuchaste, él me dijo que él te quería, no iba a descansar hasta que estés con él.
Llevaba veinte minutos en el estacionamiento de mi departamento, pensando en todo lo que me dijo Alice. Tratando de entender por qué Edward Cullen dijo eso. Yo no soy nada del otro mundo, él tiene y puede tener a las mujeres que desee, es guapo, sexy, no lo puedo negar… ¿Qué estás pensando?... ¡Dios!... ¿Qué te importa lo que piensa o quiere Edward Cullen?... Arregla tu vida antes… no pierdas el tiempo preocupándote de un niño mimado… Salí del auto y toque con mis dedos el deportivo de Jacob… respire profundo y me adentre en el ascensor… - ¡A enfrentar todo como la mujer que eres!..
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Espero sus comentarios
Besos y Abrazos
Axavenus
2 comentarios:
Graaacias!!! jajaja al final ha sido como un regalo del día de las madres, jeje, porque sólo hoy me he dado el tiempo de leerte.
El capi... difícil...
Por un momento pensé que Jake estaba enojado por haber visto a Leah, pero ¿Por qué ni siquiera la mencionó? o sea, después Bella dice que sus "ataques" comenzaron en la universidad, pero ella no sabe el motivo, sin embargo, Jake ni parecía preocupado por eso, su único motivo de rabia era la evidente atracción de Edward y Bella... mmmh... me da para pensar.
Odié a Charlie, igual que lo hice en Crepúsculo cuando insistia tanto en que Jake era mejor que Ed para ella... puaj, negro feo!!
Obviamente si él hubiese sabido dónde y con que clase de hombre estaba metiendo a su hija, lo hubiese pensado mas de dos veces, pero...mmmh...pobre Bella, o sea, dificil es llevar un marido con mal caracter, pero Jake esta loco, no quiero pensar capaz de qué sería.
Gracias otra vez, te quiero mucho, amiga,
Rocío.
Aush!!! solo asi se pudo casar bella con ese mounstro, Pobre bella el maltrato tanto fisico como psicologico es terrible. Pero Jacob porque tiene tanta ira y coraje es enfermedad o tambien le paso algo???
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